lunes, septiembre 03, 2007

El "retorno" de ETA

Durante la última tregua de ETA, un grupo relativamente abundante de expertos sobre terrorismo mediante ciencia infusa se pasaban la vida clamando que cada día, cada minuto, cada segundo que pasaba sin que el gobierno rompiera con todo y pegara fuego al País Vasco reforzaba a los terroristas. Autoevidente, oiga; como descansaban y tal en sus caseríos sin que nadie les persiguiera, a la que salieran todos esos gudaris estarían super-mega-preparados, armados con fusiles de plasma, brazos biónicos y escupiendo fuego, repartiendo muerte como si dieran caramelos.

Un servidor desde esta página, sin embargo, siendo mucho menos experto pero probablemente más razonable señalaba lo que me parecía bastante evidente: ETA estaba acabada. Excluyendo situaciones extrañas y errores del estado autoinflingidos (como la reducción de la presión policial en la tregua del 98), la banda tiene una capacidad operativa más que limitada.

Sencillamente, el estado ha conseguido que el velo de silencio y miedo que ETA generaba en los ochenta haya desaparecido. Hace veinte años, nadie o casi nadie en el País Vasco (y desde luego, no algunas de las voces más ruidosas) realmente se atrevía a delatar, denunciar o hablar mal sobre ETA; la izquierda abertzale tenía capacidad de sobras de asegurarse que cualquier "colaboracionista" sufriera las consecuencias. Con el paso de los años y la consolidación de la democracia, el estado ha sido capaz de minimizar esa capacidad de coacción que antaño tenía ETA

Sin ella, los terroristas lo tienen mucho más difícil. Cualquier operación es mucho más complicada; al no tener capacidad de castigar a "traidores" de forma eficaz, tienen que actuar con un nivel de secreto mayor. Eso hace el reclutamiento menos efectivo, al ser menos público (ya que está más controlado) los nuevos reclutas están menos "filtrados"; hay menos ojos vigilando su verdadero historial; en consecuencia, la infiltración policial es mucho más fácil.

Estos problemas se extienden a todos los aspectos de la banda. La logística es mucho más peligrosa, ya que es más fácil de detectar, moverse es más lento, entrenar es más incomodo, ya que la gente llama a la policía si escucha a tipos pegando tiros en el caserío de al lado, y un largo etcétera de complicaciones horrendas para cualquier hombre malvado.

¿Ha sido la tregua un cambio significativo en este aspecto? La verdad, me parece bastante evidente que no; de hecho, es posible que haya acabado por debilitar a la banda aún más. La patética falta de letalidad de ETA desde el final de la tregua lo dice todo; mientras que su aparato organizativo es cosido a detenciones, los únicos atentados que han sido capaces de cometer son muestras de debilidad clara: o bien petardos aleatorios lejos de todo (una bombita en una carretera), o bien ataques inofensivos contra blancos más que protegidos. En ambos casos, la necesidad de obtener inteligencia previa es baja, y muestran que la capacidad de ETA a estas alturas para ser selectivos (algo crucial en un movimiento de liberación que pretende hacerse hegemónico) es básicamente inexistente.

La tregua ha acabado por dividir aún más a la izquierda abertazale, haciendo el trabajo de los terroristas cada vez más difícil. Complicándole aún más las cosas, ya no tienen capacidad siquiera de inflingir costes políticos al gobierno; el PP se ha quedado sin discurso (atacar al gobierno porque hay atentados es demasiado cínico, incluso para Zaplana y Acebes), así que Zapatero no tiene nada que temer en cuanto a los efectos de la actividad terrorista.

La irrelevancia de los terroristas, que el PP se insistió en negar durante la tregua, es cada vez más patente. A ETA le queda o la rendición más o menos honorable (declarando una tregua otra vez y tragando con todo lo que les eche el estado) o convertirse en el GRAPO, versión 2.0, en una larga y patética decadencia. El año que viene, después de las eleccciones, es probable que volvamos a ver movimiento hablando de alto el fuego. Esperemos que quien esté en la oposición (muy probablemente el PP) se porte como personas mayores y no se pasen el día diciendo que los malos van ganando.

11 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy interesante, como siempre. Te comentaría algo más, pero la gripe me tiene las neuronas secuestradas...

A lo que venía, además, es a avisarte que el enlace a esta entrada en RP está mal.

Un saludo.

R. Senserrich dijo...

Gracias, Judas. Voy a corregirlo...

isidro dijo...

Buenas.

Lo primero, enhorabuena por el blog. De lo más lúcido que he visto últimamente.

Segundo, (opino): Darte la razón en todo. El problema de esto creo yo que es lo fácil que es hacer daño. Es mucho más difícil tenerlo todo vigilado (por suerte, evitemos 1984) que encontrar un hueco que dinamitar y matar.

A ello le añades lo fácil que es que a la gente se nuble la razón, y una bomba asesina y vuelco a las elecciones. :S horreur

Saludos.

Lole dijo...

Estoy de acuerdo.
Pero los medios de comunicación compensan la baja intensidad de los atentados.
Por ejemplo, explotan un coche robado en un polígono industrial medio desierto porque es domingo. Lleva poca carga explosiva. El coche se quema y poco más.
Es un atentado más o menos factible, porque implica poco riesgo para la banda.
Pero ojo, a 800 m. hay un buzón de correos.
Consecuencia: en los telediarios se escucha "ETA atenta contra Correos", aderezado con una música repetitiva e intimidante.

Es terrorismo de baja intensidad, sí, pero no evita que unos cuantos miles de personas en el País Vasco sigan mirando debajo de sus coches a diario.
ETA puede seguir así unos cuantos años más.
Espero equivocarme, claro.

Anónimo dijo...

Tienes razón, en el País Vasco nadie que haya nacido en torno a 25 años o menos le ha dado nunca importancia alguna al terrorismo. Y ya prácticamente la sociedad vasca pasa de ETA, se le da mucho más eco e importancia en el resto del Estado Español.
Aquí nadie habla de ETA porque no pintan nada.

Santi Benítez (Sun_Tsu) dijo...

Bajo mi punto de vista, no sólo es que ETA ahora mismo esté en sus horas más bajas desde 1977, sino que, además, su actividad jamás ha sido tan denostada entre los propios círculos de la mal llamada izquierda abertzale como ahora mismo.

Ayer mismo se podía escuchar los gritos de los detenidos en Francia por el chalet "academia" intentando arengar en euskera con eso de "la lucha es el único camino". Están jodidos y con una capacidad más que mermada. Alquien apuntaba que esa falta de capacidad en su "normal" funcionamiento los está llevando a elucubrar intentar algo en su feudo tranquilo que es el país vasco francés.

Esto tiene su lectura buena - la inexperiencia de los nuevos miembros permite a las fuerzas de seguridad del Estado cazarlos de forma más, digámoslo así, sencilla, y la realidad demuestra que es cierto-, y su lectura no tan buena - su propia incapacidad los hace cada vez menos predecibles, lo que redunda en que puedan hacer alguna barbaridad a la desesperada que sólo servirá para que la oposición siga dándose golpes de pecho-.

Todo se andará, pero desde luego lo que sí está claro es que lo único que van a conseguir es tres comidas al día y un paseo por el patio de la prisión, ya sea aquí o en Francia. Que se les meta en la cabeza.

Ôo-~

Manuel dijo...

Me parece peligroso eso del "terrorismo de baja intensidad". No soy vasco, pero en esa Comunidad Autónoma la gente que no habla de ETA es por miedo. Y de eso también tienen responsabilidad los diferentes gobiernos, que todos, insisto TODOS, han cometido el grave error de negociar con esa organización.

De todos modos, no se ha dejado de detener terroristas en los últimos tres años. No hay tanta "rendición" ni "colaboración" del gobierno con ETA como la que había cuando eran "Movimiento Nacional de Liberación Vasco"

R. Senserrich dijo...

A ver, no digo que la gente en Euskadi vaya por la calle haciendo chistes de ETA. Hay sitios donde ETA sigue siendo una organización que nadie se puede tomar a broma, y sigue dando miedo.

Lo importante, sin embargo, es que ETA es ya incapaz de disputarle al estado nada relevante. El hecho que el estado pudiera negociar, seguir deteniendo terroristas y que ETA no pudiera reaccionar (en contra a lo que hizo cuando las conversaciones de Argel en los 80) deja patéticamente claro que no son lo que eran, ni de lejos.

Anónimo dijo...

Ego-Trotsky
sobre le miedo... De verdad todo se basa en ello? No lo veo tan claro

Por cierto el hecho de los medios de comunicacion del estado no hables sobre las torturas, sobre los indultos a toorturadoes (condenados) etc, es tambien por miedo?

No se, no lo veo tan claro...

R. Senserrich dijo...

No todo, claro que no. Es un tema complejo; uno simplifica dentro de lo razonable y parsimonioso.

Sobre lo de la tortura... digamos que es el lado feo de todo esto. Los medios son cobardes.

Leon dijo...

Una vez más interesante post. Coincido con lo que dice Lole, hay algunos medios que parecen estar deseando cualquier pequeño detalle de ETA para abrir el telediario y casi "jalear" los bombazos. Desde luego en lo que ha perdido ETA ha sido en su capacidad intimidatoria sobre la sociedad vasca, hace 20 años aquello era peor que Sicilia y hoy en día no es así, por mucho que algunos políticos y periodistas vivan del tema.