martes, febrero 06, 2007

Alternativas a la politización judicial

La decisión del Tribunal Constitucional de aceptar la recusación de uno de sus miembros por un tecnicismo ha generado la habitual tormenta de acusaciones de politización de la justicia de uno y otro lado. No voy a meterme discusiones si el PP es peor o el PSOE es más malvado porque la verdad, no hay forma de ponernos de acuerdo (y supongo que es fácil sospechar cual es mi opinión, de todos modos), si no hablaré un poco del fondo del problema: si la justicia está politizada, ¿Qué reformas legales son necesarias para aumentar su independencia?

Lo primero que es necesario responder es si a PP y PSOE les interesaría tener un poder judicial más independiente. En mi opinión, la respuesta es afirmativa; el partido gobernante quiere asegurarse que no tendrá al partido de la oposición haciendo una guerra de guerrillas extraparlamentaria por los tribunales, y el partido de la oposición dejará de temer que el gobierno le deje las manos atadas con un lastre de jueces respondones. El problema, evidentemente, es conseguir escribir una reforma que no genere desconfianza en ninguna de las dos formaciones, que no parezca que el partido de la mayoría está tratando de aprovecharse de su situación.

¿Cómo se crean instituciones independientes? No hace demasiado escribí un artículo sobre el tema, dando una explicación más o menos detallada de los mecanismos a utilizar. Si uno atiende a lo dicho, verá que los tribunales españoles siguen un buen número de esas reglas: la nominación no depende exclusivamente del gobierno, los magistrados sirven por un periodo de tiempo distinto al de los políticos, y estos no pueden destituirles. En un principio, esto debería bastar para evitar estas guerras de recusaciones e intentos de nombrar jueces afines para casos importantes (como ha sucedido con el 11-M), pero sin embargo esto ha continuado sucediendo. Parece claro que o bien las armas generadoras de independencia no están funcionando, o bien hay algún otro factor creando el problema.

Lo cierto es que hay varios factores. El primero, el hecho que la independencia judicial pura no es posible obtenerla de forma realista sin dejar de lado el equilibrio de poderes. Uno podría crear un cuerpo de funcionarios separado y totalmente autónomo intocable para los políticos para los jueces, pero nada impediría realmente una tiranía burocrática judicial incompatible con la democracia. Otra opción, votar el Consejo General del Poder Judicial, no haría más que replicar los resultados electorales en el Congreso (PP y PSOE harían campaña por jueces y punto), creando una votación redundante. La otra opción, utilizada en Estados Unidos, dar cargos vitalicios para la mayoría de puestos judiciales, sería difícilmente admisible en España, especialmente para el partido en minoría en los tribunales actualmente.

El segundo factor a tener en cuenta en el sistema actual es que si bien los políticos no pueden echar a los jueces, sí pueden recompensar su lealtad a posteriori. Si vemos a gente como Gómez de Liaño, prevaricador convicto y ahora mascota predilecta de la constelación mediática conservadora, es fácil entender porque algunos jueces están tan dispuestos a ser del agrado de ciertos periodistas. Este es un problema básicamente irresoluble, y casi diría que fuera del alcance de los políticos; la independencia de los jueces no es cuestión sólo de los cargos electos.

¿Qué cambios legales se pueden introducir? La verdad, hay relativamente poco a reformar. De hecho, diría que el sistema actual es de hecho relativamente bueno, y por varios motivos. Primero, fuerza a quien ha ganado las elecciones a tener en cuenta a la oposición. Si bien esto contradice la regla de la mayoría, también contribuye al respeto de las minorías, algo que no deja de ser positivo. Segundo, si bien a veces genera resultados politizados, cuando llega el momento muchas decisiones siguen siendo sensatas. El Supremo decidiendo que reunirse con Otegui no era delito fue contra sus presuntas convicciones políticas, pero era una decisión sensata. Si bien el sistema judicial genera una cantidad de ruido a todas luces excesiva (y sigue siendo demasiado lento) no parece que acabe por siempre actuar por motivos políticos.

La politización de la justicia, la verdad, es básicamente inevitable. Lo que debemos recordar, sin embargo, es que no es algo totalmente indeseable; a fin de cuentas las leyes las votamos entre todos.

12 comentarios:

Wallenstein77 dijo...

Hola a todos:
Egocrata siento disentir, pero creo que en España no hay verdadera separacion de poderes. Es cierto que el Gobierno solo elige a parte de los altos magistrados, estando otro porcentaje en manos del Parlamento. Pero es que en España el Congreso y el Senado esta controlado por el partido que esta en el poder y aunque se tengan que hacer componendas con las otras fuerzas politicas, desde el Legislativo siempre se intentara poner a algun candidato favorable a Moncloa. Asi luego tenemos las minorias / mayorias que hay periodicamente y que parece que en funcion de quien les ha elegido, asi votan.
A los altos magistrados los tienen que elegir la carrera judicial sin que intervenga de ninguna manera los politicos y sin permitirse ningun tipo de campaña desde el ambito politico, so pena de ser apartado quien pueda ser acusado de politizacion. Sin embargo, son los politicos, aunque tengan que hacer componendas, los que eligen a un porcentaje importante de los mas importantes cargos del Poder Judicial. Asi de triste es.

Si hablamos de jueces, a Gomez de Liaño todos sabemos porque le condenaron. Simplemente porque se atrevio a ir contra Don Jesus y eso se paga. Si hablamos de jueces poco eticos, podemos hablar de Garzon, que paso de perseguir al jefe de los Gal, para formar parte del Gobierno de cierto partido con cargos politicos encarcelados y cuando no obtuvo sus objetivos personales, con quizas informacion privilegiada y poco clara, volvio a perseguir al jefe de los GAL, cuando tendria que haber sido apartado de la Audiencia Nacional y mandado a otro tribunal. Tambien podrias haber puesto ese ejemplo de juez mediatico, que en funcion de la oportunidad, es una estrella mediatica del PP, pero tambien del PSOE, cuando dice lo que quiere escuchar cada partido.
Por ultimo, a ningun partido le interesa una justicia independiente, que se pueda atrevar a investigar a estos personajes, que se creen al margen de la Ley. Que se lo digan a Ibarretxe, a Pique con el caso Ercross o al PSOE con el juez Barbero.

Saludos a todos.

R. Senserrich dijo...

Siento no estar de acuerdo. Convertir a la judicatura en un ente autonomo y autista seria una pesadilla; si ya pecan de corporativismo ahora, imagina con ese nivel de independencia. No habria ninguna clase de control o supervision sobre el poder judicial, lo que seria una renuncia a la democracia; burocratas no electos decidiendo como tiene que ser el estado.

Claro que los jueces tienen que estar escogidos por los politicos, en ultima instancia. Asi sucede en todas las democracias del mundo.

Sobre jueces estrella, me parece que la sentencia por prevaricar de ese tipo que fue contra Don Polanco no deja lugar a dudas: lo estaba haciendo y con ganas. Hubo delito. Punto.

Sobre Garzon, cuando a un juez lo odian desde ambos partidos, algo estara haciendo bien en cuanto a ser independiente.

Wallenstein77 dijo...

Hola a todos:
Egocrata me parece que es tan peligros que sean elegidos por la carrera judicial, que sean elegidos por el poder politico, lo cual puede permitir que no exista separacion de poderes, lo cual tambien es antidemocratico al estar todo el poder en unas manos. Si los altos magistrados son elegidos por los politicos, les deben el cargo a ellos (tambien me se la historia de Earl Warren porque la lei aqui) y es un peligro al vulnerarse la independencia judicial. Ojo, no digo que los jueces no sean controlados. Digo que tienen que ser elegidos entre sus miembros. Si me dan a elegir, prefiero que sean elegidos entre ellos y no por los politicos. En EE.UU. es cierto que lo pone el Ejecutivo, pero claro, alli el Legislativo si puede controlar al Ejecutivo, aunque haya mayoria del mismo partido, porque estan amenazados por las elecciones en sus distritos, cosa que en España, el diputado que no sigue las premisas del partido, salvo que sea mediatico, o se pone malo ese dia o no vuelve a aparecer en la lista. Veo que no me rebates que el Legislativo no esta separado. Si hubiera una real separacion de poderes entre Ejecutivo y Judicial, si podria hacerse que el Gobierno presente una lista y que el legislativo la diese por buena o no. Sin embargo, en España no hay una verdadera separacion de ninguno de los tres poderes. Por eso defiende que sean elegidos entre la profesion y que respondan ante el Parlamento por cualquier accion que no se corresponda con sus prerrogativas. Para eso esta el Congreso, para llamar a un juez que quiera hacer politica o cuando se extralimite. Si hubiera una verdadera separacion de poderes, si se podria hacer. No hablemos por otro lado de corporativismo, porque si los jueces lo son (no me extraña tras los ataques continuos de Jimenez Losantos o de Ibarretxe donde no se respetan sus actuaciones, pareciendo que estan al margen de la ley) no hablemos de los partidos politicos, que aunque tengan entre sus filas a acusados e incluso condenados por corrupcion los mantienen en sus filas (ojo, que eso no es patrimonio exclusivo de ningun partido). Eso debe ser muy democratico, ademas de muy edificante, tener entre sus filas a personas que estan en tramites de ser inhabilitados. Imaginate un juez del supremo, que tenga que decidir sobre desaforar a un politico por robar de los fondos reservados y que haya sido su partido quien le ha puesto o que tenga que desaforar a un politico, porque parece que se enriquecio por una operacion ilicita que arruino a inversores y que el partido de ese ministro, le eligio en su momento. Asi se fomenta la independencia del poder judicial.
Serian jueces que cuando no se cumplan las leyes, tomarian medidas, no "lacayos de los politicos" que los han elegido, sabiendo lo que va a votar cada uno cuando hay casos polemicos en funcion de las mayorias / minorias existentes en cada coyuntura. Por tanto, son personajes que deben sus puestos a los politicos, los que deciden lo que puede ser constitucional o no. Eso si es defender la democracia ¿no?
Es cierto que a Gomez de Liaño le condenaron. Pero no es menos cierto, que Garzon no se le critica porque sea independiente. Se le critica porque es una "veleta", que ademas suele cagarla en sus instrucciones y que no tiene criterios bien definidos, como se vio cuando fue como candidato del PSOE tras haber intentado juzgar a la cupula del PSOE y cuando salio de la subsecretario, les volvio a perseguir. A eso se le llama coherencia y conducta ejemplar, si señor.

Saludos a todos.

Anónimo dijo...

Me fio mas de politicos que se juegan el puesto haciendo nombramientos que de un cuerpo cerrado de funcionarios que no responde ante nadie. Quien vigilaria a esos guardianes? El parlamento? Si el congreso puede recusarlos, estariamos de nuevo en las mismas.

La independencia se garantiza creando incentivos para que a los jueces no les importe lo que digan los politicos. Me parece que lo de los nombramientos vitalicios deberia plantearse, asi como radicales incompatibilidades incluso despues dejar la carrera.

Wallenstein77 dijo...

Hola a todos:
Tito estoy de acuerdo en la ultima parte de tu comentario. El que ha ocupado ciertos cargos en cualquiera de los tres poderes del estado, deberian tener muy dificil desempeñar diversas funciones. Lease el caso de Garzon por ejemplo, ademas de evitarse el que pudieran recibir "pagos" por favores prestados.
Sin embargo, en este pais los politicos en muchos casos y por desgracia, no responden tanto a lo que decimos los ciudadanos y si a lo que decide el partido. Un ejemplo de esto fue la creacion de una gran cantidad de puestos en la administracion de las autonomias populares para colocar a todos los cargos que se habian quedado sin poltrona, coche oficial y dietas, amen de altos sueldos, tras perder las elecciones de marzo del 2003. Salvo que seas un lider de partido, a esos "funcionarios del partido", que por desgracia es lo que son muchos, sus cagadas las seguimos pagando todos, porque so colocados por el partido.
El Congreso deberia ser quien evitase los abusos de poder en el Judicial. Abusos de poder o actuaciones irregulares, no acciones que molestasen a los politicos por supuesto. Para eso, deberia existir un Legislativo que de verdad fuese independiente y no el que existe en España.
Saludos a todos.

Anónimo dijo...

La sentencia contra Liaño lo que dice literalmente es que supone, metiéndose en la mente del juez, que se equivocó a propósito, pese a actuar de acuerdo con el fiscal (al que sin embargo no procesaron, en un acto pleno de coherencia), sin tener ninguna prueba de ello. Si eso es "dejarlo claro"...

Donaire dijo...

Yo estoy con tito el elfo. Tiene razón. Por cierto, el post buenísimo ego.

Alex Guerrero dijo...

En ocasiones se puede evitar a la justicia. La tesis de Gemma Sala (forthcoming) va justamente sobre eso. Su hallazgo es que la conflictividad CCAA-Estado (número de pleitos uno contra el otro) se ha ido reduciendo muchísimo en los últimos 25 años. Las razones?

a) Las sentencias del TC iban creando claridad frente a la ambiguedad constitucional.

b) Los actores (CCAA, Estado) cada vez han podido preveer más en qué materias ganarían siempre y en cuáles perderían.

c) Por tanto éstos negocian partidas y contrapartidas (no te pleiteo esto si tu no me pleiteas aquello, que tenemos las de perder ambos). La política encuentra cauces para evitar a la justicia. Y por eso se aprueban leyes como la de Dependencia (que me encanta) pero que es una intromisión clarisima en las competencias de las CCAA (que llevan este tipo de "bienestar"), y éstas, de momento, calladas negociando: si te dejamos pasar esto, PSOE, tú nos concedes aquello y lo otro.


Una implicación de esto es que los políticos, incluidos los nacionalistas, prefieren recuperar ambiguedad en la constitución frente a excesiva claridad. Y sólo claridad cuando se trata de sus propias competencias: de ahí las últimas reformas estatutarias, hechas casi de cara al Constitucional, más que a la ciudadanía.

zarevitz dijo...

Si no me confundo, los cargos judiciales también son vitalicios en España (hasta la jubilación), con dos excepciones: los magistrados del Tribunal Constitucional y los miembros del Consejo General del Poder Judicial, aunque ninguna de estas dos instituciones ejerce "poder judicial" en el sentido de la Constitución.

El requisito de mayoría de 3/5, en lugar de llevar a amplios consensos, ha llevado a las cuotas, de la que resultan magistrados/vocales del PP y magistrados/vocales del PSOE. Para forzar el consenso, una opción quizá sea que, en cada legislatura, se nombre un magistrado/vocal, con mayoría de 3/5. De este modo, el magistrado/vocal que salga elegido cada año, habría obtenido un respaldo amplio.

Otra medida podría ser que, cuando venza el periodo para el que fue nombrado, el magistrado/vocal saliente no pueda permanecer en funciones; cuando finaliza su mandato, se va para su casa. De este modo, evitaríamos que un partido se beneficie de bloquear los nuevos nombramientos porque, por ejemplo, el magistrado/vocal saliente es de su cuerda y quieren mantenerlo a toda costa en la institución aunque sea en funciones.

Citoyen dijo...

Cuando hablas del poder judicial, me recuerda a tu artículo sobre el analista político. Cuando un juez toma una decisión, todo el mundo presume que actúe de forma partidista "ha favorecido al PP" "quiere ganarse del favor del gobierno" "está haciendo oposición". Nadie se ha parado a pensar que simplemente pueden actuar de acuerdo con el derecho y la interpretación qeu les pareces mas razonable... El poder judicial es algo irreductiblemente autónomo en toda democracia que se precie. Hay sitios donde lo es más, como en el common law (pero allí se habla de gobierno de los jueces...), y sitios donde lo es algo menos, como en el derecho continental, pero sepan una cosa: la alternativa es mucho peor.

Por cierto, lo de los políticos que se juegan el puestom vamos a relativizarlo... Si fuera así podría alguien explicarme porque Acosta sigue siendo diputado?

Por cierto, lo que se ha dicho mas arriba sobre Garzón es simplemente infundado, por no decir falaz.

Wallenstein77 dijo...

Hola a todos:
Citoyen por alusiones. ¿Garzon no investigo al Gal? ¿Garzon no fue subsecretario de algo con el ultimo gobierno Gonzalez? ¿Garzon no dejo la politica, volvio a la Audiencia Nacional y siguio persiguiendo al Gal? ¿Es cierto que hubo miembros del PSOE condenados por su relacion con el Gal? ¿Es cierto que todo el mundo sabia quienes formaban el Gal? No se donde ves tu la falacia, salvo que te refieras que es odiado por todos los partidos por su independencia.

Saludos a todos.

Anónimo dijo...

después de todos estos follones yo no sé si es q soy demasiado ignorante, pero me parece demasiado sencillo. Q los nombre el parlamento vale, pero q exista un régimen de incompatibilidades estricto, no sólo contemporáneo al cargo, demasiado obvio, si no en el futuro y en el pasado.

Es decir, q 5 o 10 años después de ejercer el cargo no pueda ser nombrado ni alto fiscal del estado, ni ministro ni la madre q lo parió.

Ni tampoco q fiscales del ministerio puedan ser nombrados por el gobierno.

Evitar las contrapartidas, los "pagos" por portarse dócilmente, las recompensas por ser "buen" fiscal, o por ser "buen" magistrado del TC