miércoles, febrero 13, 2008

Primary Colors (XXXVII): el ritmillo

Los americanos le llaman momentum. En El País le llaman inercia, iniciativa. Yo, la verdad, prefiero llamarlo algo un poco más hispánico; el ritmillo.

Obama tiene el ritmillo. Tras sacar un empate glorioso el pasado martes, llegando desde atrás, de lejos, y empatando contra casi todos los pronósticos, el tipo ganó en las cuatro primarias de este fin de semana de calle (Washington, Louisiana, Nebraska y Maine) y acaba de ganar las tres votaciones del martes (Maryland, Virginia, Washington DC) en plan apisonadora. El aire de ganador de Obama es innegable, y las primarias, de golpe y porrazo, parecen estar cada vez más difíciles para Hillary Clinton.

Desde el martes pasado, todo parece salirle mal a Hillary. Después de ser incapaz de dar el golpe decisivo prometido el supermartes, el miércoles se conoció que su campaña estaba muy corta de dinero, hasta el punto que tuvo que darle un préstamo de cinco millones de dólares de su propio bolsillo. La máquina de recaudar fondos de campaña de los Clinton se encallaba sin remedio, mientras que Obama recibía dinero sin parar de cientos de miles de activistas sin problemas (parece que subestimé la importancia de internet; Obama está sacando petroleo). La campaña de Hillary bombardeó a sus filas de correos electrónicos pidiendo dinero (recibí cuatro en dos días; estoy apuntado a todo), pero la semana acabó igual, con Obama por delante.

El fin de semana la cosa fue aún peor. Obama ganó a Hillary con claridad en todas partes, incluyendo tres estados blancos como la nieve en cuanto a distribución racial. El domingo el día acababa con la noticia que Patty Solís Doyle (latina, por cierto), la jefa de campaña de los Clinton "dimitía" para "pasar tiempo con su familia" (y dejando a muchos políticos latinos que apoyaban a Clinton bien cabreados). Y para acabarlo de rematar, hoy se llevan un repaso atroz en las tres elecciones (incluyendo Maryland, que en teoría era un estado para Clinton), y otro de sus jefes de campaña dimite de puntillas entre toda la carnaza.

La cosa suena mal, pero se pone aún peor. Obama ha ganado prácticamente todos los grupos demográficos menos mujeres blancas, todos los niveles de ingresos, y básicamente dejaba a Clinton sin excusa posible. Y aún más preocupante, Hillary está por detras en número total de delegados de cara a la convención.

Sí y no. Los medios de comunicación americanos están aplaudiendo con las orejas a O Rei Obama, nuevo favorito, y ya preguntándose qué milagro tiene que hacer Hillary para evitar el naufragio. En febrero quedan dos primarias, Wisconsin (donde Obama va por delante en las encuestas) y Hawaii (Obama es de ahí). La campaña de Clinton lleva diciendo desde hace un par de días que no pasa nada, todo normal, y que van a ganar el 4 de marzo en Tejas y Ohio y confirmar su nominación.

Los periodistas escuchan y fruncen el ceño. Si no sucede nada inesperado, Hillary estará de aquí siete días con nueve derrotas, cero victorias, y la duda constante de por qué va a ganar ahora, si lleva tanto tiempo perdiendo. Tejas es enorme; hacer publicidad requiere presupuestos abultados, y Clinton tiene menos dinero. Lo mismo sucede con Ohio. Sí, la composición demográfica de los dos estados favorece a Hillary, y las encuestas le dan entre 12 (Tejas) y 17 (Ohio) puntos de ventaja ahora mismo, pero Obama ha estado más lejos en muchos sitios y ha acabado ganando de calle.

La verdad: los periodistas exageran. Obama tiene el ritmillo, pero no tiene la nominación ganada ni de lejos. Para empezar, Tejas y Ohio son de aquí tres semanas; dos semanas después de Wisconsin, que puede ser otra derrota de Clinton. En una campaña como estas primarias, dos semanas es una eternidad, y pueden pasar muchísimas cosas. Obama parece estar en firme control del debate en la campaña; la discusión es sobre cambio y esperanza, no experiencia y politiqueo. Una metida de pata grave, un comentario equivocado o un desastre imprevisto (cae la bolsa, explota un avión, muere Britney Spears) y a saber cómo acabamos.

Por añadido, la cuenta de delegados en los demócratas es proporcional. Obama está por delante, pero aún ganando todos estos estados, Hillary está muy, muy cerca. Tiene más votos, más delegados, ha ganado más estados, pero aún queda tanto partido que es difícil decir que lo tiene ganado.

De todos modos, por primera vez desde que empezó la campaña, le doy un 60% a Obama de acabar ganando. Hillary lo tiene complicado. No puede atacar, ya que no hace más que recalcar su imagen de persona antipática. No puede decir que tiene experiencia, ya que la gente parece querer cambio por encima de todo. No puede decir que es mejor candidata, ya que Obama saca mejores resultados contra McCain de calle. Y no pueden apelar al voto de grupo (mujeres, latinos), ya que su voto está erosionándose en estos sectores incluso ahora.

Los Clinton son políticos extraordinarios, y la verdad, no me extrañaría que tengan algo en mente que se me escapa. Tejas y Ohio parecen favorecerles. Aun así al paso que van, Obama va camino de darles una sorpresa desagradable en marzo. Otra más.

Nota al margen: los republicanos, por cierto, siguen igual. McCain ha ganado, pero anda que el sector conservador no le va a dar la vara. Pobre tío... Por cierto, el tipo ha cometido un error de impresión hoy; ha empezado su discurso de victoria tres o cuatro minutos antes que Obama acabara el suyo. El contraste de pasar de escuchar a un tipo joven, vital, inspirado a un viejo aburrido de 72 años hablando de terroristas y del miedo que debemos tener ha sido patético.

Oh, y Hillary ha perdido dos tipos más de su campaña mientras escribía. Joer.

13 comentarios:

Anónimo dijo...

Demasiadas cosas en contra tiene Hillary como para darle sólo un 60% a Obama. No es solo el ritmillo, es la carrerilla.

En caso de que lleguen a la convención con una ligera ventaja de Obama, ¿qué crees que pasaría?

Yo apuesto a que los Superdelegados no van a tenerlos lo suficientemente cuadrados como para ir en contra de lo que haya dicho el electorado.

Anónimo dijo...

Siento llevarte la contraria. A los superdelegados les acaba dando igual lo que la gente piense, no hay más que ver lo que pasó con Bush y las elecciones. No soy ni de lejos un entendido, pero el sistema de votación americano no me inspira confianza. Solo espero que la mano oculta permita realmente el cambio. Estados Unidos necesita a ese hombre, no se realmente como sera, pero en uno de sus discursos (tras una de sus victorias, no recuerdo cual) me emociono y casi me hizo llorar, es increible. Con esa capacidad de dialogo puede conseguir muchas cosas para su pais, y con palabra, no con armas. Si gana, el debate será otro. Ya he leido en el pais a algun lumbrera que le da por muerto antes que en la casa blanca, y no en plan metaforico. Me gustaría saber que piensa la sociedad, si realmente le apoya sera un problema para muchos. Mi duda es, el pueblo quiere cambiar ¿Es posible el cambio?

Mahavishnu dijo...

Me asombra un poco la cantaleta del "cambio".
Egócrata, ¿puede Ud. decirme en que exáctamente consiste el cambio que propone/significa Obama ? Algo concreto , no las prédicas desde tribuna(púlpito?).

R. Senserrich dijo...

Sobre los superdelegados, debemos recordar que este es el partido demócrata que perdió las presidenciales de forma traumática en el 2000 porque nueve jueces así lo decidieron. No creo que el partido se atreva ( y los superdelegados son "el partido") a inflingir una farsa de ese calibre a los militantes. Especialmente cuando incluso dentro del partido Hillary es respetada, pero no amada.

Sobre el cambio, te refiero al programa: :-)

http://www.barackobama.com/issues/

A ver, no es un revolucionario; de hecho el programa es parecido al de Hillary, incluso siendo más moderado que ella en algunas cosas. La cuestión es, el tono es distinto. Es un político joven que no ve la política como un juego de suma cero, que cree en aplicar políticas universalistas, no la tradicional manía americana de perder el tiempo sólo cubriendo a clientelas.

Y la verdad, suena a Zapaterismo un poco. De hecho uno de los asesores de Obama estudió en Madrid la campaña del 2004...

Anónimo dijo...

Fuera de programa, el mero echo de un candidato negro tenga posibilidades de llegar a la casa blanca demuestra que algo esta cambiando en al sociedad americana. Y que llegue a presidente sería un cambio a todos los niveles. Os imaginais un presidente negro (paso de eufemismos) en la moncloa? Lo de la mujer lo veo más posible, pero de otra raza. No? Solo eso ya sería un cambio.

PD: Por cierto, me encata este blog. Enhorabuena por los articulos.

David Gonzalez-Rodriguez dijo...

Comentario pedante: El término "momentum" procede de la mecánica y es el producto de la masa por la velocidad de un cuerpo. Cuanto más "momentum" tiene un cuerpo (por ejemplo, si pensamos en un camión, cuanto más grande o más rápido vaya), más fuerza hace falta para pararlo (el porrazo será mayor). Por eso el uso del término "momentum" en política me parece muy descriptivo.

En castellano también se usa "momentum" (que al fin y al cabo es latín), "cantidad de movimiento" o "momento lineal". Para mantener el gancho del término original, podemos abreviarlo como "momento". O, como El País, usar "inercia", que es un término más impreciso para referirse al mismo concepto. No sé, Egócrata, es que lo de "ritmillo" me suena un poco pachanguero.

R. Senserrich dijo...

No te suena pachanguero; lo es. Pero creo que el mundo necesita más referencias fuera de lugar al Milagro de P. Tinto :-).

Anónimo dijo...

Para mi k se van a estrellar de mala manera... va a ser de espanto!!! Jajajajajajjajaja

RubenBA dijo...

Creo que parte del éxito de Obama está en su ambigüedad. Querer el cambio o prometer esperanza son mensajes vacíos y carentes de proyecto alguno. Obama es una incógnita y creo que nadie sabe muy biena a ciencia cierta qué hará cuando llegue al poder.

Por ello es normal que gane en todos los sectores, entre ricos y pobres, blancos y negros, hombres y mujeres, cuando lo único que propones es un cambio y esperanza. Obama vende un nuevo amanecer para un día incierto mientras que Hilary vende su experiencia(más concreta y por ello, que gusta a algunos y a otros no), no creéis?

Anónimo dijo...

No.

R. Senserrich dijo...

No. De hecho el programa de Obama es bastante detallado, y tiene ideas económicas francamente sólidas en muchos aspectos. Que no las puedas leer en la prensa es otro tema, pero las ideas están ahí.

Eso no quiere decir que me guste todo lo que dice. Creo que sus ideas económicas son más modernas que las de Hillary (es partidario de aplicar políticas más claras, universalistas y fáciles de entender, por ejemplo, en vez del laberinto de requisitos habitual en EUA) pero su programa de sanidad es peor. No hay político perfecto, pero el tipo es listo, tiene ideas claras y es capaz de venderlas con estilo.

Y sí, muchas de ellas representarían un cambio grande, enorme a lo que sufren los americanos ahora.

RubenBA dijo...

Gracias por corregirme egocrata!!. He mirado su programa electoral y está más detallado de lo que pensaba. Las informaciones que tenía de Obama se basaban en medios extranjeros y algunos videos con sus discursos donde, por casualidad o por la naturaleza de los actos en parte, no desgranaba sus medidas con la concreción de su programa electoral.

Aun así, he de reconocer que me sigue gustando más Hillary porque creo que podría ser una gran presidenta, ya que es inteligente y experimentada pese a no ser tan carismática. Obama me da la impresión de ser un fenómeno con grandes probabilidades de decepción... aunque sería genial que madurase manteniéndose en primera línea política demostrando lo que es capaz de hacer para tener su momento más adelante, un según tren al que Hillary podría no llegar debido a su edad.

Un cordial saludo y felicidades por el blog!

*Qué cambio, tener que elegir entre dos candidatos "decentes" y no como en España, que se presentan los mismos que hace 4 años y sin decir nada nuevo...excepto para empeorar su imagen.

Anónimo dijo...

¿Qué tal el término "impulso"? Obama ha cogido impulso desde el supermartes, desde luego...

Para Clinton no va a ser fácil frenarle, pero tampoco hay que sacar las cosas de quicio: la diferencia de votos y delegados no es significativa, y visto lo visto, Texas va a ser una gran victoria para Clinton con un 99.99% de posibilidades. Sobre Ohio, ya no estaría tan seguro...

Respecto a las posibilidades de Clinton/Obama de vencer a McCain... Es algo alucinante, pero casi 150 años después de su guerra, la línea Mason-Dixon sigue tan marcada como siempre, y en noviembre los republicanos van a presentar un candidato que en general ha sido vencido en el Sur ¿Les conviene entonces a los demócratas presentar a otro candidato que no convence en el Sur, por malas que sean las razones?

Aquí entran en juego los candidatos a la vicepresidencia, un puesto que ha ganado una sorprendente relevancia en las últimas presidencias, y que en estas elecciones será importante, dados los puntos débiles de Clinton (que cae mal y es mujer), Obama (carece de experiencia, y es negro)y McCain (es viejo, y rechazado por los conservadores y el aparato del partido) ¿Elegiría McCain a Huckabee? ¿Serían capaces Clinton y Obama de formar equipo, y les convendría hacerlo?