martes, julio 26, 2005

Sobre disparar a sospechosos y la tercera guerra mundial

El presidente del CGPJ, Francisco José Hernando, ha dicho dos cosas hoy, una estúpida y la otra bastante sensata, al hablar de terrorismo. Lo divertido es que la izquierda judicial en mi opinión ha enviado a parir lo sensato y ha ignorado la estupidez, como de costumbre. Veamos.

La mayor tontería que ha dicho ha sido que estamos en la tercera guerra mundial. Mucho me temo que no, y sólo mirar fotos de Verdún en 1917 o Colonia en 1945 creo que basta para ver que no estamos en una de esas. Dicho crudamente, occidente se puede permitir 200-300 muertos al año en varios atentados, ahora uno en Madrid, ahora uno en Berlín, ahora uno en Los Ángeles, y quedarse tan ancho. Estoy bastante seguro que otro realmente grande con 3000 muertos no haría gran cosa a largo plazo, aparte de poner a los cuatro belicistas a cien y con ganas de invadir algún país al azar. El terrorismo es algo grave y todo eso porque mueren inocentes, pero en términos de amenaza real a occidente, no hará gran cosa, fuerzas de ocupación / liberación (táchese lo que no proceda) aparte.

Lo que es relativamente sensato es que haya defendido el disparar a sospechosos que podrían cometer ataques suicidas. No estoy diciendo que Rambo haría un excelente guardia civil, no es eso, pero es algo de sentido común. Si la policía ve un tipo dispuesto a volarse en una estación de metro esperando en el anden, y están seguros que lo hará, me temo que darle el alto no es una buena idea; el individuo le dará al botón de explotar. En casos extremos, y cuando no hay más alternativa o la vida de los policías corren peligro, que disparen es lo más sensato. Si, pueden entrarles ataques de pánico y acabar con alguien que es inocente, es cierto. Por eso digo que debe ser el último recurso absoluto, y sólo cuando hay absoluta certeza. Si es la única manera de salvar vidas inocentes, pues no hay más remedio...

11 comentarios:

Anónimo dijo...

Aunque estoy de acuerdo contigo en lo que respecta a lo realmente grave de las declaraciones del personaje, no dejes de echar un vistazo a esto.
-----
No vendría mal saber qué es lo que hacen las fuerzas de seguridad de Israel en estos casos (y no son precisamente hermanitas de la caridad ni recién llegados al mundillo del patapum-tos-conmigo-palante). No recuerdo ahora mismo que se haya producido allí algún caso similar al del brasileño. Y eso que...

Por lo demás comparto tu criterio.
-----
Me pregunto cuándo se piensan poner las pilas (alcalinas) los periodistas y similares para empezar a informar de lo que se publica y emite en los países musulmanes -especialmente editoriales- para saber qué se opina por esos lares. Porque de momento parece que la única voz del mundo musulmán es Bin Laden y todos tan contentos... y que vivan las tertulias y don Carlos Mendo (guiño a la emisora progretarra-islamofascista por antonomasia).

R. Senserrich dijo...

Muy buena aportación, no había pensado en ello. Muy cierto. La verdad, disparar a matar sólo debe hacerse como ultimísimo recurso.

Por cierto, Pelham 1-2-3 es una peli estupenda :).

Anónimo dijo...

Pues a mi me parecen una gilipollez los dos puntos. Me explico:

- Con respecto a la guerra mundial, coincido básicamente contigo. Esto no es una guerra mundial, ni siquiera es un fenómeno de violencia que cause un gran número de víctimas. Fuera de las grandes guerras, en Europa en el siglo XX ha habido bastantes atentados, disturbios, actos de violencia en general como para que esto no tenga mucha importancia relativa. Sólo hay dos diferencias: está golpeando a la acomodada Europa, que después de tantos siglos esta disfrutando de la paz, y es irracional. Pero por lo demás, se le da más importancia de la que tiene. Compararlo con una guerra mundial, con sus millones y millones de bajas, es casi insultante.

- Y con respecto a lo de tirar a matar, pues mira, es una perogrullada tan grande (nadie discute que la policía deba hacer uso de la fuerza para evitar daños mayores) que me da la impresión de que el propósito de esas palabras es justificar a posteriori lo del brasileño en Londres. Y me parece algo infame. Porque algo está fallando, si la policía se puede cargar a alguien de esa manera, y aquí nadie hace nada. Porque recordemos que ese chaval no había hecho nada, más que llevar un chaquetón porque tenía frío, y correr cuando 3 tíos con ropas de calle y empuñando pistolas le gritaron. Puede que nosotros no nos comportáramos igual, pero son reacciones lógicas. Y algo debe hacerse para que eso no vuelva a ocurrir. Y lo peor de todo, es que me parece que si el muerto hubiera sido inglés, ya se habría arreglado.

Augie March dijo...

Me parece interesante tu razonamiento, nearco. Me da lo mismo llamarle guerra si lo que se siente es miedo. Ahora que habíamos superado el "pre-millenium tension" aparece un nuevo elemento de tintes apocalípticos.

Dicho crudamente, occidente se puede permitir 200-300 muertos al año en varios atentados, ahora uno en Madrid, ahora uno en Berlín, ahora uno en Los Ángeles, y quedarse tan ancho. Es asumible cualquier tipo de "daños estructurales", por seguir llamando a las cosas por su nombre.

Pero creo que es mirar hacia otro lado si incluímos los atentados en el mismo saco que en el de "fallecidos en carretera este puente", o "víctimas de catástrofe natural". Estos últimos se superan con el tiempo o se disuelven entre las unidades contables. Pero, ay con el terror. Si efectivamente se produce un fenómeno más o menos frecuente...¿quién nos asegura que no se produce una desestabilización fuera de las previsiones?

Valga que las repercusiones económicas de los atentados han sido picos sin apenas consecuencias.(En mi opinión eso se debe al carácter hasta ahora ocasional de los atentados y a la elasticidad de los mercados). Pero una auténtica yihad mundial, indiscriminada contra occidente, sería harina de otro costal.

Recuerdo que decía Recarte: "...una subida de tipos, por ejemplo. No repercute instantáneamente. Pero hay algunas familias que, temporalmente dejan de comprar yogures. Y la industria de yogures se resiente. Y como consecuencia se despiden...". Era un relato para niños sobre el efecto "alas de mariposa", pero lo que quiero decir con ello es que una aparición más o menos frecuente de estos actos puede tener consecuencias, y no lo podemos ignorar. Es la continuidad la que da importancia a este tipo de hechos y tiene como consecuencia el miedo, el terror.

Respecto a la actuación de la policía, y entendiendo que errores desafortunados como el acaecido en Londres se puede dar en cualquier contexto "no post-atentado", creo no sólo legítimo sino necesario que un Estado tenga mecanismos dinámicos de adaptación a nuevas formas. Estaríamos listos si no fuera así.

Y no lo llamemos guerra (menos aún Mundial, III o IV) pero no nos detengamos en esa discusión. Dice Spinoza: "si la esclavitud, la barbarie y la soledad han de ser llamadas paz, nada más deplorable para los hombres que la paz". Añadamos miedo a esclavitud, barbarie y soledad. La meta es lograr la paz, pero no cualquier paz.

Anónimo dijo...

Totalmente de acuerdo contigo. Con este tema parece que todo el mundo se ha puesto de acuerdo en llevarse las manos a la cabeza, y hablar de la barbaridad que resulta disparar antes de preguntar; pero, ¿si el hombre a quien dispararon hubiera sido en realidad un terrorista suicida pensarían igual? Yo creo que no. Me parece que el tema se ha desenfocado, en vez de analizarse la situación concreta en la que la policia se enfrenta con un terrorista suicida se habla como si las fuerzas de seguridad fueran a actuar así en cualquier circunstancia. Y la verdad, lo que ocurrió el viernes pasado fue un error, pero cuando haya seguridad sobre la identidad de un sospechoso yo encuentro justificada la política de tirar a matar, eso sí, con garantía de a quién se está disparando. Porque a un terrorista suicida no hay otra forma de frenarle.
Un saludo!

Anónimo dijo...

¿Algo se mueve?

¿Seguirán las risitas conmiserativas después de esto? ¡Incluso de esto! Con lo bien que les caía Blair a alguno y ahora se hos hace islamoprogre.

Jessica dijo...

Por principio, lo de matar al sospechoso no me hace ni puñetara gracia. En primer lugar, porque en Europa no está vigente la pena de muerte, que yo sepa; y en segundo lugar, porque la presunción de inocencia debería estar por delante. Huelga decir que aún más la vida. La política de "matar al sospechoso" puede acabar en ejecuciones sumarias. No estoy dispuesta a permitir que se instale en Europa la ley del Oeste.

Tengo entendido que en otra actuación policial posterior se han utilizado pistolas paralizantes. La idea de pone los pelos de punta, pero tal como está el patio, lo prefiero como mal menor a que a un hombre inmovilizado en el suelo por varios agentes de policía le disparen a quemarropa en la cabeza...

Saludos:
Jéssica.

Jessica dijo...

Y sobre lo de la Tercera Guerra Mundial, me vais a permitir que me ponga un poco cínica: ¿Estamos en guerra con las industrias automovilísticas? Pues deberíamos: los accidentes de tráfico matan a más gente al año que los terroristas suicidas.

Lo digo como dato por si alguien se anima a invadir la General Motors.

Saludos:
Jéssica.

hobbes dijo...
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
hobbes dijo...

Lo del tiro en la cabeza... me parece terrible que andemos hablando sobre si está bien o está mal. Si todos convenimos que no hay III Guerra Mundial, al igual que tampoco había Guerra Fria, entonces en Londres corren tiempos de paz. No hay toque de queda, ni se ha impuesto una ley marcial, ni ninguna otra cosa... Creo que un hombre es perfectamente libre de huir de unos tipos con pistola y no se merece un tiro por ello.
Se supone que estamos en un "estado de derecho" que precisamente nos da ese para hacer lo que queramos donde queramos, eso sí, sin quebrantar la ley. Obviamente, el estado de derecho debería buscar fórmulas alternativas al tiro en la chola. Pistolas paralizantes, rayos de colores, lo que sea. Hay un poder ejecutivo (la policía) que se dedica a cumplir la ley sin salirse de ella, y eso es lo que ha de hacer. Si no hay medios para detener efectivamente a un terrorista suicida, pues a buscarlos, digo yo, pero sin poner en peligro más vidas inocentes

Anónimo dijo...

creo que de lo unico que se tiene razon ..no es que estemos en una tercera g.mundial..hay una guerra secreta de sectores muy radicales y no somos nada mas que nosotros mismos ya que permitimos en nombre de la democacia que nos pisoteen nuestros mas elementales derechos.....