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miércoles, octubre 08, 2008

Abofeteando a los mercados (II)

Algunas respuestas a los comentarios del post anterior:

Depositos bancarios

Los depositos están seguros. No hay peligro real de quiebras bancarias masivas en España, en parte porque los bancos están bien, en parte porque Zapatero no es idiota. En el caso en que un banco se fuera al garete el gobierno lo nacionalizaría y punto.

Los bancos no quiebran. Si algo se aprendió en el 29 es que no se les deja quebrar. El estado expropiará y arruinará accionistas, pero los depositos están seguros.

Solidez de la banca española

Este es uno de los motivos sobre por qué esta crisis es tan insidiosa. Los bancos españoles son perfectamente solventes de por sí, y no deberían tener problemas en condiciones normales. El problema es que no vivimos en condiciones normales.

No es que el interbancario funcione mal. Sencillamente, está total y absolutamente muerto. No hay nada. Zilch. Cero. Los bancos españoles pueden vivir en tiempos de crisis, siempre que el sistema financiero internacional no esté completamente muerto. El problema es que lo está. No hay crédito para nadie, no importa lo sano que esté.

Un ejemplo: gobiernos estatales. California, un estado que él solito es la octava economía del planeta, intentó vender bonos la semana pasada; 12.000 millones de ellos. Es como operan normalmente los gobiernos en todas partes, deuda a corto plazo hasta que llega la siguiente remesa de impuestos.

Bueno, no vendió ni uno. Si California, que tiene una de las mejores bases fiscales del mundo, no puede emitir deuda, imagina un banco español, por muy sano y bien regulado que esté.

Sí, los bancos son sólidos... si los miramos desde el prisma de una crisis normal. Estamos hablando de un desastre absoluto, sin embargo. Es como pedirle a Michael Phelps que cruce un río de lava nadando.

¿Dónde va el dinero?

La gran ironía de todo esto es que los mercados, ahora mismo, sólo se atreven a prestar dinero sin sudores fríos a un actor: los estados. Al tipo de interés que sea; los bonos americanos a corto plazo tienen de hecho interés cero (negativo en términos reales) estos días.

Hay tanto miedo que los prestamistas están dispuestos a perder dinero a patadas sólo para sacarse la pasta de encima. No tienen miedo ni del excesivo endeutamiento de los gobiernos o que les paguen a base de imprimir moneda e inflación. El ataque de pánico está a esos niveles.

Sonará mal, pero yo si fuera gobernante casi que sacaría la tarjeta de crédito y a vivir, oiga.

miércoles, junio 06, 2007

Recordatorio: la ficción de ETA

Estaba leyendo esta excelente entrada en Debate Callejero hablando (como no) del final de la tregua, y me ha recordado algo que escribí no hace demasiado siguiendo una línea argumental muy parecida. Quizás vale la pena recuperarlo.
La política española lleva muchos años viviendo en torno a dos debates en gran parte irrelevantes. El primero, y que ya me he hecho un hartón de mencionar, es el presunto peligro estatutario. Lo cierto es que a nivel comparado, la forma del estado y su grado de descentralización es bastante irrelevante en relación a su capacidad de crear riqueza, como discutía hace unos días. El debate en este caso debería centrarse en lo que vota el electorado y hacen los políticos, no en presuntas maldades generadas por el sistema.

El segundo tema irrelevante es, aunque parezca mentira, ETA. Y lo es desde hace al menos veinte años.

martes, junio 05, 2007

ETA vuelve a las andadas

ETA, en un comunicado, declara por finalizado el alto el fuego y anuncia la vuelta de la lucha armada sin restricciones. Varios comentarios rápidos.

1. Hay un único culpable de que esto suceda: ETA.

2. Si en agún momento alguien entiende que culpo o he culpado al PP, me remito al punto uno.

3. ¿Qué ha conseguido ETA de todo este fregado? A efectos prácticos, absolutamente nada. El estatuto no ha variado una coma, los presos siguen en la cárcel (y no, aun contando a De Juana como "libre", sigue siendo un patético fracaso), Euskadi y Navarra siguen separadas, no hay secesiones. Siguen igual de lejos de sus objetivos que siempre.

4. El fin de la tregua, por tanto, no tiene nada de victoria de ETA, algo que estoy seguro algún idiota terminal dirá mañana. Si por "victoria" uno entiende "no conseguir un puñetero cambio", me parece que no entiende lo que la palabra significa.

5. El hecho que la ANV esté en las instituciones, por cierto, es el fondo irrelevante. Ya hable de lo idiota que toda la pelea sobre su ilegalización me parecía, no me voy a repetir. El estado no va a tener demasiado problema vigilando las cuentas de esta gente, y la verdad, si se ponen burros les caerá la ilegalización y punto.

6. ETA se va a enterar de lo que vale un peine, por cierto. El estado le estaba dando una paliza espantosa antes de la tregua; no creo que lleguen demasiado lejos.

Dejando a ETA de lado, hablemos un poco de política:

1. Efectos electorales para el PSOE, más bien pocos. Tradicionalmente (o al menos eso dicen las encuestas desde hace 30 años) el electorado no culpa al gobierno de los atentados; culpa a ETA y punto. Si Zapatero y compañía no son tontos (es decir, están mañana repitiendo que toda, toda, toda la culpa es de ETA, y que es evidente que no han conseguido nada en tregua, y lo harán aún menos sin ella), el asunto no creo que tenga demasiado peso.

2. Efectos electorales para el PP, nada a corto plazo. Si culpan al gobierno, es poco probable que el argumento tenga demasiada tracción fuera de su electorado más tozudo. Si se ponen al lado del gobierno, no creo que cambien a nadie de opinión. Si se quedan en un "la culpa es de ETA, pero el gobierno cayó en su trampa", caeran en un argumento circular bastante irrelevante. Eso que si el gobierno cedía, ETA ganaba, y si no cedía, mataba queda muy bien dicho a gritos, pero en el fondo es como plantear eso de si usted sigue pegando a su mujer; de hecho no es una dicotomía, y en el fondo la pregunta no la hubiera estado planteando el gobierno, sino ETA.


3. Efectos a largo plazo para el PP, eso ya es más difícil de ver. Mantener la chorrada del malvado gobierno vendido a ETA es bastante más difícil cuando ETA está diciendo a gritos que el gobierno está lleno de malvados fascistas. Sin el espantajo islamoprogretarra que agitar, y con el juicio del 11-M cerrándose, ahora les tocará ser creativos para que no se hable de sucesos en el planeta Tierra.

4. A todo esto, siempre habrá los listillos que dirán que hablando con terroristas nunca se consigue nada, etcétera. Dejando de lado el hecho que a veces si que ha conseguido algo (Terra Lliure lo dejó de forma dialogada, sin ir más lejos), este argumento no invalida el hecho que deba intentarse. Si ETA dice que tregua y que quiere dejarlo, uno debe probarlo. Si suena la flauta, suena la flauta. Lo contrario sería pedir a un terrorista que volviera a matar.

En fin, muy por encima, pero estas son las primeras impresiones. Profundizaremos en lo que atraiga más comentarios mañana.

lunes, junio 04, 2007

Tonterías mayoritarias

En la vagamente ficticia localidad de Almorrana del Monte, las elecciones han producido el siguiente resultado electoral:

- Frente de Liberación de los Gnomos del Jardín (FLGJ), 8 concejales.
- Partido Acebiano de Unión (PAU), 7 concejales.
- Partido Proletario Poldavo (PPP), 7 concejales.

El FLGJ es un partido malote. Son un grupo de gente maleducada, vociferante y muy, muy ruidosa, que se pasa la vida insultando a la gente del PAU y el PPP. Les llama traidores a la patria, vendidos, opresores de la gnomidad y feos constantemente. Tienen la molesta costumbre de hacer sonar una sirena de bombardeo cada vez que un miembro de otro partido tiene la palabra en el pleno municipal. Y por si fuera poco, es parte de su ideología no ducharse más de dos veces al año.

Mientras tanto, el PAU y el PPP son buena gente. Uno un poco de izquierdas, el otro un poco más nacionalista de derechas, pero nada que no se pueda hablar con una cervecita. Son amables, realistas y no creen que lo de gritar todo el rato sea una buena idea. Aparte, siempre que están en desacuerdo sólo tienen que hablar de lo molestos que son los del FLGJ y su maldita sirena.

¿Quién debe pactar con quién? Según la reforma legal que propone el PP, la gente del FLGJ debe ocupar la alcaldía. El PAU y el PPP representan casi dos tercios del electorado, y tanto sus políticos como sus votantes creen que el FLGJ no es la mejor opción. Es más que probable que en una hipotética segunda vuelta, nadie que hubiera votado a las dos candidaturas no-gnomistas hubiera pasado al FLGJ; sin embargo, el PP cree que sería más justo y democrático hacer que la tercera opción de la inmensa mayoría fuera quien ganara la alcaldía.

Lo he dicho otras veces, y lo repito otra vez: en un sistema proporcional / parlamentario no manda quien más votos saca, manda quien es capaz de formar mayorías. Si el PP es singularmente incompetente en el arte de hacer amigos, que no digan que la culpa es de la ley electoral; el problema es suyo al no entender qué tiene que hacer uno en una democracia europea para ganarse una poltrona.

Quién sabe. La manía crispadora y la obsesión polarizante del PP no deja de ser una página del librillo de los gurús del Partido Republicano en Estados Unidos. Los conservadores por aquí no tienen que liarse con alianzas con nadie para ganar en un sistema estrictamente bipartidista; es posible que los trucos que valen en un sistema no sean tan aplicables al otro lado del Atlántico.

domingo, junio 03, 2007

De mentiras y política económica

El vocinglerismo de la derecha tiene una curiosa tendencia a mover la portería sobre la marcha. Evidentemente, si uno no sigue lo que ellos dicen es un determinado principio económico, usted está equivocado, no importa lo mucho que respete lo que defendían anteriormente.

El editorial de hoy de los melones de siempre es un ejemplo clásico. Uno de los mantras más repetidos por los comentarista de la derecha es la noción que el gobierno de Zapatero utiliza políticas económicas estatalistas de extrema izquierda; en el editorial se habla del "espantoso" crecimiento del gasto público (en términos nominales, por supuesto) y de otros presuntos horrores como el hecho que el gobierno no haya bajado impuestos.

El pequeño problema es que una mirada a los números deja bastante claro que el gobierno Zapatero es cualquier cosa menos estatalista. Estamos hablando de un ejecutivo de izquierdas que cerró el año pasado con un superávit en las cuentas públicas del 1,8% del PIB; en otras palabras, que dejó sin gastar casi un 2% de toda la producción del país que el estado tenía en su bolsillo, y lo dedicó a reducir la deuda pública. No sólo eso, si no que además no hay planes de dejar de tener superávit en los próximos años, y de hecho el porcentaje de gasto público en comparación con el PIB ha bajado un punto en los últimos tres años, del 39,5 al 38,5%. No hay país en nuestro entorno con estas cifras, pero el hacer caricaturas en editoriales parece hacer innecesario tener el más mínimo contacto con la realidad.

Lo cierto es que si uno mira sólo los datos agregados, son cifras de un teórico gobierno de derechas, no uno de izquierdas. En distribución del gasto público el gobierno socialista sí que ha hecho política de izquierdas (como la ley de dependencia o la -más bien torpe- ley de igualdad), pero la política fiscal ha sido un neokeynesianismo alérgico a la inflación de manual. Y cuando se quejan del fantasma de cambio climático, algo que incluso Bush ya acepta como un problema, lo cierto es que las quejas de estatalismo están aún menos justificadas.

Por cierto, el otro día leyendo sobre el nuevo libro de Al Gore me encontré en una de las páginas de la derecha bocinista americana un artículo más que curioso. He aquí un fragmento:

"It’s a common liberal conceit: liberalism is the very definition of sweet reason, so an attack on liberalism is an “assault on reason.” Democracy is only truly democratic when the Democrats are in charge. Debates aren’t truly informative unless the liberals win the argument. The same holds true for elections."


Anda, dónde habré oido esta clase de acusaciones antes. Como de costumbre, una clásica diatriba contra la conspiración mundial progresista que controla los medios y se creen que tienen el imperio de la razón.

miércoles, mayo 30, 2007

Inmigración o la eterna solución imperfecta

En política hay básicamente dos clases de problemas. Por un lado tenemos los fáciles; son aquellos problemas que tienen una solución más o menos complicada, pero que si se aplica sabemos que el resultado será algo mejor de lo que tenemos ahora. Por otro lado, tenemos los problemas difíciles de veras. Son aquellos que tienen muchas soluciones, todas caras, y ninguna tiene un resultado que sea claramente mejor que los otros, ya que siempre hay alguien que sale perjudicado.

Inmigración, como acaban de descubrir muchos políticos americanos estos días, es un ejemplo bien claro.

El punto de partida en Estados Unidos, como en España, es el de una legislación que básicamente no funciona. Casi todo el sistema de inmigración americano chirría dolorosamente, desde una USCIS (el departamento que tramita el papeleo de los pobres foraneos) más preocupada en recaudar tanto dinero a golpe de tasas como sea posible, a unas leyes totalmente bizarras que hacen mucho más sencillo y barato vivir ilegalmente en el país que "disfrutar" del papeleo para regularizarse.

El ejemplo más sangrante es la maldita USCIS y su curiosa forma de financiación. El Congreso, en su infinita sabiduria, decidió en los ochenta que si uno quiere vivir en el país tiene que pagarse el papeleo, así que que decidió que la agencia de inmigración debía financiarse ella solita a base de tasas. El resultado, veinte años después, es que para una tarjeta de residencia uno acabará pagando como mínimo $1.200 sin utilizar un abogado, y sobre unos $2.000 si quiere que le ofrezcan "premium processing" (sí, una agencia que ofrece un servicio más caro para acelerar tu papeleo. Ni en Italia). Todo para una espera que puede llegar a tres años. Y oiga, que en unas semanitas van a triplicar los precios.

Mientras uno espera que le den la tarjetita, por cierto, en teoría no está legalmente autorizado para trabajar. Si quiere un permiso temporal (que le concederán, con suerte, en tres meses) debe pasar por caja y pagar otros $300. Clásico. Después los políticos van por el mundo preguntándose por qué hay de doce a veinte millones de ilegales. Pues mira, aquí tienen una de las razones.

Más allá de burocracias espantosamente ineficaces, el problema con las leyes de inmigración es que incluso con una maquinaria estatal bien engrasada (y que en esta comparación eso implique estar refiriéndome a la española ya lo dice todo) la cosa sigue sin dar un resultado aceptable.

Hablemos de dos escenarios extremos hipotéticos, el de una política de fronteras cerradas y cero inmigrantes, y el de una política de puertas abiertas. Si el primer escenario fuera posible de implementar, una situación de este estilo genera problemas graves. El primero, y más claro, los enormes costes de poner esta política en funcionamiento. Hacer las fronteras totalmente impermeables es complicado. Lo más grave, sin embargo, es la enorme barrera burocrática que se añade a la economía en muchísimos sectores, caso del turismo (¡visite Korea del Norte!), inversión exterior o incluso el más humilde congreso de cardiología que uno puede tener en mente.

Por añadido, una política excesivamente restrictiva crearía un problema grave a la economía, especialmente en los sectores donde la mano de obra es escasa. La agricultura, turismo y construcción se estrellarían espectacularmente, víctimas de unos costes incontrolables. No estaríamos hablando, sin embargo, sólo de puestos no cualificados; la investigación en las universidades americanas sería mucho menos potente, al igual que muchos sectores de alta tecnología donde el país ha estado importando ingenieros a mansalva.

Un país con fronteras totalmente abiertas tendría probablemente los problemas opuestos. Los costes burocráticos de un arreglo así serían cero, pero el enorme incremento en la oferta de mano de obra provocaría una caída en picado de los salarios. Mal que nos pese, la inmigración tiende a frenar el aumento de ingresos de los trabajadores, especialmente en los sectores donde los inmigrantes se concentran. Desde el punto de vista redistributivo la inmigración sigue siendo positiva, pero lo es básicamente para los recién llegados, que ven como sus ingresos aumentan muchísimo en comparación a sus países de origen.

Si situamos la política migratoria en un nivel intermedio como intentan hacer la mayoría de países, nos enfrentamos a otros problemas. Por un lado, estamos dañando los salarios de los locales a cambio de asegurar que la economía no se ahogue por falta de recursos. Por otro lado, debemos asegurar que los inmigrantes estén en el país legalmente, primero para que paguen impuestos, y segundo para poder tener cierto control sobre cuántos queremos. Además, queremos asegurar que los nuevos se asimilan a la cultura local relativamente rápido, evitando la formación de guetos y conflictos sociales graves.

Estaremos por tanto buscando siempre un equilibrio. Si nos pasamos en nivel de control en la entrada, es muy probable que el libre mercado nos dé una lección y nos aumente el número de ilegales. Si somos demasiado duros con los ilegales (o incluso con los legales), poniéndoles las cosas difíciles para conseguir empleo o regularizarse, podemos provocar la formación de comunidades marginales o bolsas de pobreza viviendo únicamente de la economía submergida o el crimen. Si somos demasiado laxos, perjudicamos a nuestros votantes de mala manera, y así sucesivamente. No importa lo que hagamos, cualquier política tendrá costes para alguien, afectará la cohesión social de algún modo, y dejará a buen seguro un montón de gente cabreada.

¿Cómo es la reforma de inmigración que está tratando de sobrevivir a la desesperada en el Congreso? La verdad, es uno de estos feos consensos diseñados en comité que no acaban de gustar a nadie. Esta vez, sin embargo, el hecho que la ley sea un mamotreto que disgusta tanto a derecha como izquierda no deja de ser una noticia razonablemente buena. El diseño básico sigue en líneas generales las ideas de Bush (es una de las pocas cosas en las que el presidente no dice estupideces, dicho sea de paso), centrándose en hacer la entrada de foraneos razonablemente difícil, pero dando a quien está ilegal dentro del país una oportunidad decente de regularizar su situación. ,

La idea básica es bastante simple: entrar debe ser complicado, para evitar una entrada excesiva de inmigrantes, pero trabajar una vez dentro debe ser relativamente sencillo, para asegurar que los que entran son asimilados y no se quedan encallados en un rincón oscuro de la sociedad. Es el modelo que Estados Unidos ha aplicado desde siempre con un éxito notable. Cada veinte años se retoca la ley, adaptándola a los nuevos tiempos, y cada veinte años se escuchan los mismos gritos de desacuerdo desde los mismo sitios. La reforma pasará, a trancas y barrancas, tarde o temprano, con algunos ligeros cambios, para reemerger dentro de un par de décadas cuando el número de ilegales vuelva a salirse de madre.

Un par de comentarios para terminar. Cuando digo que la ley es un mamotreto, lo digo en serio; la criatura ocupa 628 páginas, tiene más de 700 secciones y es de un aburrido espantoso, aparte de añadir una cantidad de papeleo adicional y tasas variadas delirante. La extensión se deriva en parte del hecho que los americanos no usan la distinción entre ley y reglamentos que se usa en España, pero aún así lo chungo para legalizarse va a ser entender lo que dice el engendro, no otra cosa.

Hablando de España, la política de inmigración seguida por los gobiernos del PP y del PSOE ha sido muy parecida a la americana; más por pura potra que no por otra cosa. No es que sea maravillosa, pero es bastante razonable. Lo digo a menudo, pero los políticos españoles tienden a hacer las cosas bien.

martes, mayo 29, 2007

Elecciones: epílogo

Un par de comentarios, a corte de epílogo, sobre las elecciones del Domingo.

Primero de todo, váyase señor Simancas. Ni analizar ni historias, el Partido Socialista de Madrid ha demostrado que es lo suficiente inútil para pasar de una derrota humillante con fuga de diputados incluida a caída de cinco puntos, colapso, catástrofe y ridículo aún más monumental. Y eso sólo hablando de nivel autonómico, que les han dejado solitos; en el ayuntamiento aún les doy la presunción de inocencia, aunque han sido igualmente incapaces de generar por si solos un candidato electoral decente.

Sí, trabajar en la oposición en Madrid es difícil. Aguirre se beneficia de un sistema fiscal que le permite bajar impuestos, dar más servicios, llorar a Solbes que le dé más dinero y pagar metro a base de deuda desaforada, aparte de disfrutar de la siempre generosa inversión estatal que recibe la capital. Si encima una resulta ser de forma inexplicable una especie de diosa liberal / reencarnación hispánica de Margaret Thatcher y Juana de Arco para los medios de comunicación afines (que aseguran que tu electorado se movilice), pues miel sobre hojuelas. Y no hablemos de Gallardón, un tipo que tiene el Don del JoseBonismo pero en guaperas capitalino; es decir, es visto por los medios del lado contrario como la gran esperanza de hacer de su partido algo decente. Así no hay quien juegue.

De acuerdo, el trabajo es complicadillo. Sin embargo, lo que es aún más complicado es que en una ciudad como Madrid, tan propensa a desastres zanjiles y catástrofes urbanísticas espantosas, en una Comunidad tan propensa a pifias tontas (y ganada de forma tan "especial"), y con dos políticos del mismo partido además ridículamente propensos a liarse a guantazos entre ellos, nadie en el PSM sea capaz de montar una oposición remotamente decente. La derrota del PSOE a nivel agregado viene básicamente merced de su incompetencia; ya es hora que alguien pague.

Y no, no es algo que haya descubierto antes; uno lleva cagándose en la organización de los socialistas madrileños desde hace una temporada. Selección adversa a piñón. Esperemos que el fuego purificador de la derrota lleve a los militantes con cerebro que aún sobreviven en ese cortijo a quemarlo hasta los cimientos, tirar las cenizas al espacio y clavar estacas en el corazón al colectivo de vampiros políticos que viven en ese agujero. Destruyan el poblado para salvarlo de una puñetera vez.

Por algún motivo, no veo que eso acabe sucediendo.

Como final a esta serie de lloriqueos electorales, enlazar a un artículo del inefable Pío Moa, ejemplo cabal sobre por qué mezclar la lectura de resultados electorales, el Silmarilion (versión anotada) y cantidades ingentes de orujo no es una buena idea. Es un ejemplo clásico de esta irritante manía que se gastan algunos por la derecha de hacer análisis político como quien escribe un poema épico; no son elecciones, es la guerra eterna entre el espíritu indomable de la verdadera España luchando de forma incesante contra las fuerzas de Polanco, la izquierda, los separatistas y la estulticia congenita de los jodidos votantes, que siguen sin darse cuenta que España se rompe. Cuando necesito épica friki juego al Zelda (que bueno que es el Twilight Princess, rediós) o leo el Señor de los Anillos, no me pongo a hablar de política.

Vamos, no siempre. Ojalá hubiera más ponderación y artículos como este, oiga.

domingo, mayo 27, 2007

Empatando técnicamente

Parece que al final de la noche tendremos una repetición de los resultados del 2003: los dos partidos bien juntitos, separados por menos de medio punto. Ahora mismo el PP está muy ligeramente por delante, algo que no creo que cambie demasiado.

Algunas conclusiones rápidas. La primera, y más evidente, muy pocos cambios. Incluso con una participación relativamente baja, el PP no ha sido capaz de colocarle una derrota clara al PSOE; ha salido un resultado igual de aburrido que en el 2003. Segundo, el PP ya puede empezar a hacer amigos entre los nacionalistas, porque aún con un milagro o catástrofe socialista el año que viene, no sacaría la mayoría absoluta ni de broma.

Sí, ya sé que en la entrada anterior digo que no se puede extrapolar, pero es algo que se debe repetir más a menudo. Con la actitud de los conservadores esta legislatura, sólo les vale ganar de goleada, ya que casi nadie entendería un pacto con ellos. Y esto no es Alemania; un gobierno de gran coalición con el PSOE no lo veremos ni de broma.

Hablando de específicos, los resultados de Navarra son una demostración palpable que no hay nada mejor para un partido nacionalista que estar en el punto de mira del PP y sus corifeos en unas elecciones. A NA-BAI le han hecho la campaña en a medida y gratis, oiga.

Del resto, estoy a la espera a ver cómo acaban las cosas en Baleares, que me parece es el último punto de interés. Casi que me tengo que reprimir, pero ya les vale a la horda de micropartidos regionalistas dividiendo el voto. Parece que el PP pierde la mayoría absoluta, pero se dependería otra vez de lo que le plazca a la gente de Unió Mallorquina esta legislatura. Veremos.

A todo esto, en otra demostración de lo malo que es lanzar gente en paracaidas a la muerte electoral, Miguel Sebastián obtiene el peor resultado del PSOE nunca visto en la capital.

De todos modos, sea quien sea el que saque el piquito extra de votos en caso de empate, el PSOE no puede estar contento. Sí, han sobrevivido, y es bastante probable que con mayor participación acaben por imponerse en las generales. Pero quedarse en tablas cuando tienes la economía creciendo al 4% y tu producción legislativa ha sido más que notable es francamente preocupante. Los socialistas han estado jugando a la contra toda la legislatura, con el PP escogiendo a placer de qué se hablaba en el parlamento. O se dedican a explicarse como Dios manda, o les van a robar la cartera.

La verdad, es hora que se dejen de historias y empiecen a explicarse. Si creen que se pueden arreglar las cosas en Euskadi, es hora que salgan y lo digan claramente. Puede ser algo tan sencillo como "Sí, podemos arreglarlo, y sí , estamos en ello. Y ahora callaros y dejadnos trabajar, coño". El PP habla de sus fantasmas de forma incesante; es hora que el PSOE deje de permitir que le marquen la agenda.

No sólo eso: el gobierno ha pasado algunas leyes excelentes. Es hora que las expliquen. Es hora que los ministros dejen de meterse en tonterías económicas y declaraciones intempestivas. El PP les ha ganado por primera vez en siete años; si no se espabilan, tendrán el gobierno con las mejores cifras económica de Europa ganando a rastras y con pactos unas elecciones generales.

A todo eso, para el PP menuda victoria. Han ganado, pero pierden dos comunidades casi con total seguridad, sin ganar nada a cambio. Y en sus dos blancos preferidos, esas comunidades que presuntamente ellos van a salvar del desastre (Cataluña y el País Vasco) sufren sendos descalabros. Es muy curioso que los dos más activos rivales de Rajoy, los dos que esperan su descalabro, son los que le han dado la victoria al partido. Si se dejan de lado los inusualmente brillantes resultados de Gallardón y Aguirre, el PP no ha hecho gran cosa.

Por una vez, diría que los dos grandes partidos tienen motivos de sobra para no estar satisfechos. Tanto griterio durante los últimos años ha cambiado bien poca cosa, aparte de dejar más gente en casa sin votar.

Actualización:
a todo esto, lo de Madrid es digno de estudio. Entre la patética capacidad política de la inigualable FSM y el ilimitado peloteo propagandístico a Gallardón y Aguirre, realmente se puede decir que la "victoria" del PP viene casi en exclusiva de los resultados en la capital. La mitad de los 270.000 votantes socialistas que se han quedado en casa (el PP apenas ha bajado en votos absolutos) han sido en Madrid. La otra mitad, en Cataluña, donde la baja participación se ha cebado especialmente en la izquierda.

El hecho que Cataluña celebre sus autonómicas separadamente siempre reduce la participación, y ha contribuido al resultado flojo, flojo del PSOE.

Municipales 2007: aquí ganarán todos

Unas cuantas cosas, antes que empecemos a tener resultados serios:

1. Todos los partidos van a decir que han ganado. Con 8.000 y pico municipios, todos tienen razón.

2. "Interpretar" los resultados en clave nacional: ya lo digo por adelantando, salga lo que salga. Por mucho que el PP y PSOE hablen de las elecciones como si fueran algo nacional, los resultados son muy difíciles de extrapolar.

3. El "mensaje" de los votantes: los votantes no envían mensajes cuando votan; sencillamente escogen una lista entre todos los posibles candidatos. Que en Navarra se vote a Nafarroa-BAI no significa que uno apoye el terrorismo, odie España, desprecie la humillación de Zapatero o crea que los pinchos de tortilla son demasiado caros; lo único que el pobre ciudadano dice es que esa lista es la menos mala. Punto. Ejercer de oráculo psicológico del ethos subconsciente de la nación española mirando el reparto de escaños y concejales es una soberana estupidez. Es difícil hacerlo con buenas encuestas postelectorales (de hecho, el 95% de las chorradas que se escucharán mañana son imposibles de comprobar), así que hacerlo mirando votos en bruto es aún peor.

4. Eso significa que sí, el voto como instrumento de opinión política es bastante crudo. Nada que no haya dicho antes, vamos.

5. El hecho que algunos candidatos saquen un resultado excepcionalmente bueno (Aguirre y Gallardón, probablemente) no significa que sean el nuevo mesías de la derecha o nada por el estilo. Algunos nacen con la flor en el culo e inmunidad mediática absoluta, aparte de gobernar una de las comunidades más fáciles de gestionar del país.

6.Si con lo que ha caído el PP no tiene un aumento de votos espectacular, un control ferreo de Navarra y ni una perdida importante, no se puede decir que hayan sacado un buen resultado. El PSOE parte de una posición bastante ventajosa (en agregado los socialistas ganaron el último ciclo electoral), así que si las cosas no cambian demasiado, el PP debería contarlo como otra "derrota" en el casillero.

viernes, mayo 18, 2007

Horrores vascos y redactores espantosos

Unas cuantas ideas deslavazadas de la última revelación que va a matarnos a todos de Gara y sus muchachos.
  1. Victor Gago, el tipo que perpetra la crónica en Libertad Digital, hubiera sido fusilado sin contemplaciones por mi profesor de lengua castellana en el instituto si le presenta algo tan horriblemente redactado. Entiendo que en LD aplican el método paranoico-aleatorio al periodismo, pero me parece que escribir como un dadaista es ir demasiado lejos.
  2. En otra exhibición de analisis selectivo del discurso, Rajoy se cree lo que dice Gara ahora a pies juntillas. Uno aplaude a los malos cuando le interesa, claro.
  3. Aún visto desde un punto de vista liberal-histérico, nada de lo que escribe Gara es especialmente terrible o novedoso. Que el PSE reconozca que en el País Vasco hay un "conflicto político" es como aceptar que el mar es húmedo. Coño, claro que hay un conflicto. Hay un grupo de nazis con boina pegando tiros. Y coño, claro que es política. Hay 150.000 votantes que los apoyan en las urnas.
  4. El hecho que alguien del PSE hablara con Batasuna en el 2001 ó 2002 es bastante irrelevante. Primero, porque oficial o extraoficialmente, todo el mundo habla con Batasuna de vez en cuando en Euskadi, PP incluido. Segundo, porque el hecho que alguien hablara no implica que se ordenara desde Ferraz. Tercero, porque el hecho de hablar no implica que se estuviera tratando de llegar a acuerdos; sentarse en una mesa y conversar puede crear cierta confianza, pero no implica nada más.
Y no, no me vale que se paseen los fantasmas de no se qué cesiones a De Juana y la ANV. Ni se puede tener un tipo en la cárcel cuando ya ha cumplido condena (y De Juana está muy cerca de ese momento), ni se puede aplicar la ley de partidos como una especie matamoscas indiscriminado con listas negras de apestados. El gobierno no tiene que demostrar su inocencia.
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jueves, mayo 17, 2007

Geografía de la corrupción

Se ha hablado mucho de la corrupción urbanística estos días de campaña. Siguiendo esa tradición tan hispánica de discutir sobre lo importante pero a la vez perder de vista el fondo de la cuestión por completo, el "debate" ha acabado estrellándose en el tradicional griterío sobre qué partido es el más corrupto.

Cosa que no deja de ser una lástima, porque con el número de casos en investigación y mirando los números con calma podemos ver que el problema sigue un patrón bastante claro y ciertamente lógico. Y a sabiendas del daño que estos asuntos pueden producir en un sistema político, no estaría de más estudiarlo con un poco de criterio y buscar posibles soluciones.

Partiré de tres supuestos previos, para evitar meterme en jaleos partidistas excesivos. Primero, doy por entendido que el porcentaje de cretinos deshonestos está repartido de manera uniforme entre partidos y regiones. Es decir, la probabilidad de encontrar un potencial corrupto a nivel municipal en el PP o el PSOE es idéntica, ya que la pasta moral de ambos partidos es razonablemente parecida, y la honestidad media está distribuida igual por comunidades, no siendo el malagueño medio más propenso culturalmente al trapicheo que un tipo de Soria.

Segundo, y eso se desprende de la primera condición, todo el mundo tiene un precio. De igual modo que prácticamente cualquier persona en este mundo besaría Rossy de Palma si le dan suficiente dinero, casi cualquier político es en última instancia comprable si se le baña de millones de forma suficiente obscena y con cierta garantía de no ser pillado. Habrá gente más desesperada y barata que otra, pero en general, todos acabamos por dar un valor monetario a nuestra honestidad.

Tercero, voy a presuponer que la distribución de casos en investigación no sigue criterios partidistas. Quizás sea un poco suponer, pero no creo que una mente maligna en Moncloa esté lanzando las hordas investigadoras de forma calculada para maximizar el daño electoral al PP. Hay un montón de alcaldes socialistas paseando por juzgados, en gran parte debido a la igual distribución de la deshonestidad entre partidos. Si hay algo de partidista sobre el incremento en el número de casos de corrupción, en todo caso, diría que se deriva más de un especial celo investigador de este gobierno para combatir un problema grave que otra cosa. Combatir la corrupción urbanística era una parte importante del programa del PSOE, y parece que están cumpliendo. No hay necesariamente más corrupción, si no que es posible que ahora se combatan con más fuerza.

Miremos de nuevo el mapa de distribución de casos de corrupción estos días, y vemos claramente que si damos los supuestos como válidos, tenemos un patrón relativamente claro sobre qué está sucediendo en este mercado. Estoy bastante seguro que si pudieramos hacer un pequeño modelo combinando incremento de precios de viviendas por municipios y valor por metro cuadrado de terreno podríamos predecir con un detalle aceptable qué zonas serán más propensas a sufrir esta clase de tramas.

La explicación es sencilla, y nace del extremadamente incompetente sistema de financiación que usamos en España con los municipios. Los ayuntamientos relativamente pequeños dependen de forma abrumadora de los ingresos derivados de licencias de obras. Como guardianes en la concesión de estos permisos, los alcaldes tienen de hecho una capacidad notable de manipular el precio del suelo restringiendo su uso, pero también saben que para recaudar y dar servicios dependen de ir liberándolo poco a poco.

En la mayoría de municipios, esto no es un problema grave, ya que la demanda de nuevas viviendas es relativamente limitada. No hay demasiada gente que quiera ir a vivir a Salvacañete, Cuenca, y no hay demasiados promotores que estén peleándose por ese suelo que el ayuntamiento puede o no recalificar. El alcalde tiene por tanto un poder de negociación limitado, ya que los promotores no están dispuestos a hacer cosas raras para poder construir. Los beneficios, sencillamente, no merecen la pena.

El problema surge cuando el municipio es algo parecido a Marbella. El suelo es escaso, los precios son astronómicos, y el beneficio potencial para un promotor es gigantesco. Lo que es aún más delicioso, si el promotor consigue que a él le den la licencia y a otros no, el negocio será aún más redondo. El alcalde en esta situación está en una posición muy, muy tentadora. Primero, puede freir a los promotores con unas licencias obscenamente caras, que pagarán igual. Segundo, puede otorgar las licencias según le plazca, seleccionando candidatos a base de subasta de sobornos. Tercero, con toda la información y capacidad de reparto de caramelos que tiene, puede hacer a sus amigos y familiares extremadamente ricos. El resultado es el conocido.

¿Cómo se puede romper esta dinámica? La respuesta más sencilla sería eliminar el mecanismo de licencias y calificación de terreno, y dejar que cada uno edifique lo que le plazca donde quiera. Es una respuesta válida, pero erronea; el resultado quizás sea menos corrupción, pero se traduce en la patéticamente ineficiente tradición urbanística americana de densidades de población bajas. Mantener la densidad alta en las ciudades es algo deseable, y usar reglas de zonificación es la mejor manera de ocuparse de ello.

Se tiene que buscar otras vías, y lo cierto es que no hay ninguna solución perfecta. La más evidente es reforzar de forma obsesiva la vigilancia sobre materias de urbanismo. Más gente vigilando, más independiente, y mucho más voraz. Como mayor es la probabilidad que te cacen, mayor será el precio que uno pida. El problema para el potencial corrupto es que a un cierto nivel el promotor no pagará extravagancias, y que un pago exagerado será mucho más fácil de detectar de todos modos.

Esto, diría, ya se está haciendo, y de forma bastante relevante a órdenes de Madrid, y no tanto de las Comunidades Autónomas. Tanto contacto entre secretarios de organización y alcaldes, tanto miedo a no cabrear a nadie de la región parece haber hecho de las administraciones regionales unos actores bastante inoperantes, con pocas excepciones.

La segunda vía sería arreglar el sistema de financiación municipal de una puñetera vez. Si los alcaldes no dependieran tanto de la "subasta" de licencias de obras para recaudar, es bastante probable que las tentaciones de promotores cazando licencias disminuyeran considerablemente. Sea mediante un impuesto sobre la propiedad racional, sea un IBI modernizado, los municipios deben financiarse de otro modo.

Queda explicar, sin embargo, dos cuestiones básicas que la verdan me joden el modelo. La más sencilla es por qué Madrid y Barcelona capital, dos auténticos monstruos en términos de precios de la vivienda, no han tenido (aún) un caso de corrupción grave. La explicación que se me ocurre es que primero, la visibilidad de los dos alcaldes (y lo vigilados que andan por la prensa) hacen meterse en chanchullos demasiado peligroso, y segundo, el hecho que los municipios no tienen terreno libre y ya recaudan bastante por otros medios como para meterse en jaleos oscuros.

El segundo problema de mi explicación, algo más grave, es por qué Cataluña, Navarra y el País Vasco tienen muchísima menos corrupción de lo que sería de esperar. Quizás sea algo derivado del modelo que explicaba sobre Palermo, quizás sea una cuestión que ya no queda demasiado suelo con el que especular en las zonas "golosas", pero la verdad es necesario meterse más en ello. ¿Será que las policías autonómicas pasan de todo?

Otros dos artículos estupendos

Un enlace rápido a un par de magníficos ejemplos de blogosferismo entusiasta:
  • Absolute Bourdieu habla de la blogosfera, estructura del debate y lo fascinante y complicado que es todo. El artículo es larguísimo (de hecho, es más de revista académica que de bitácora) pero es francamente estupendo.
  • Los incansables moqueteros vuelven a la carga, esta vez con una geografía ideológica rápida de España. Muy curioso y revelador. Recuerdo no hace demasiado un conocido inglés muy cosmopolita diciéndome que Barcelona era de lejos la ciudad más izquierdosa que nunca había visitado. Aún será verdad.
A todo esto, desde el MSV me intertextualizan de forma sentida (y francamente hilarante) mi guía sobre el correcto de hablar normal - conservador. Me asalta la duda: ¿es la izquierda tan propensa a quejarse de olvidos e imputar horrores implícitos como es la derecha?. Lo cierto es que yo trato de evitarlo tanto como puedo, y me parece que los medios de la izquierda (excluyendo El Plural, que es un panfleto) no son tan propensos a caer en ello. ¿Son imaginaciones mías?
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martes, mayo 15, 2007

Prólogo obligatorio para satisfacer a la gente normal

En vista de los constantes errores semánticos, metodológicos y retóricos que la gente anormal cometemos cada vez que escribimos, el Alto Tribunal para la Pureza de Lemas Públicos (ATPLP), con la colaboración de Libertad Digital (LD), la fundación Sagrado Acebes por la Elecuencia (SAE) y el FLGJ han decidido publicar un manual de buenas maneras. Las normas del manual, lejos de ser recomendaciones, son total y absolutamente obligatorias. No cumplirlas conllevará mofa y escarnio público y desprecio por parte del ATPLP, LD, SAE, FLGJ y toda la gente normal (TM) del país.

Uso de la palabra España:

la palabra "España" deberá siempre ser acompañada de términos como "nación española", "Unidad de Destino en lo Universal" y "patria indivisible de todos los españoles por la gracia de Dios" de la forma más obsesiva posible. Cualquier parlamento o crónica debe ir acompañada de un recordatorio intenso y potente del caracter español del lugar y los actores implicados.

Ejemplo:
La final de la liga española de futbolín entre el equipo español del Farruquito Albacete y el español Pincho de Tortilla Mostoles tendrá lugar en el bar Monchi, parte de la Nación Española, en la ciudad de Torrelavega, perteneciente al Reino de España, todo indivisible él.

Condenas a todo lo malvado:

Cualquier discurso que uno pronuncie, libro que uno escriba o conferencia en que uno aburra debe incluir, de manera obligatoria, una mención condenatoria clara, rotunda y vociferante a los siguientes enemigos de todo lo normal: ETA, Fidel Castro, el toro que mató a Manolete, Stalin, Pol Pot, al menos doce dictadores africanos, José Bové, cualquier persona que haya mencionado el nombre de Aznar en vano, todo aquel que cometa actos vandálicos contra el PP, todo aquel que piense mal contra el PP, todo aquel que piensa (en general), Rubalcaba, los vascos malos, los anormales, aquellos que quieran destruir la familia, aquellos que quieran destruir occidente, los Palestinos malos, los iraquíes malos, lo inmigrantes malos y el Frente Poldavo de Liberación. Como mínimo.

Ejemplo:
Antes de anunciar los ganadores del tercer concurso de ganchillo para paranoicos de Cuenca, permitanme expresar mi más rotunda condena a ETA, los ataques al PP, el malvado partido comunista de la Unión Soviética (...) ...

Demostración de inocencia:

Cualquier expresión pública de opinión o acto folclórico en que uno tome parte debe venir precedido de una demostración pública y pluscuamperfecta de inocencia ante los siguientes posibles cargos: conspirar contra España, colaborar con el enemigo (ver la lista en el apartado anterior), disentir sobre el olor de la nubes, ser un islamoprogreetarra, recibir subvenciones para hacer películas, ser enemigo de occidente, odiar a Estados Unidos, opinar que a Rajoy no le sienta bien la barba, haber sido contaminado de maldad por alguien y creer en la evolución de las especies.

Ejemplo:
No cabe. Son como 15 HD DVD de 50 Gigas llenos de documentos ultracomprimidos, coño.

Interpretación de la realidad:

Cualquier comentario, palabra o acto de fe ejercido en público o en privado debe atenerse a las normas y encíclicas publicadas por los miembros de la coalición de los normales para ser consideradas válidas. En caso de conflicto entre realidad y teoría general de la normalidad, la realidad está obviamente equivocada y controlada por la hegemonía mediática propagandista del imperio prisaico.

El criterio principal para interpretación es que todo lo bueno ha venido a este mundo de manos de la derecha y los liberales (el hecho que los liberales y la derecha fueran fuerzas antagónicas en el pasado es una manipulación polanquista), y todo lo malo del mundo es fruto del Marxismo, el Progresismo, Antisemitismo, Antiamericanismo, Anticlericalismo y la izquierda en general. Eso incluye las cruzadas, la Santa Inquisición, Operación Triunfo y las humillantes derrotas de España en Eurovisión. Si enviáramos a la Pantoja, ganaríamos fijo. Ya te digo.

Ejemplo:
La Armada Invencible fue destruida a causa de la incompentencia del sistema comunista del Felipismo Segundino y su desprecio al estado de Israel. Eso es una de las causas obvias que demuestran que la izquierda ya estaba organizando el alzamiento de 1934.

Negación de las creencias del enemigo:

Cualquier artículo, prosa poética, cantar de gesta o discurso variado deberá negar cualquier creencia, símil o concepto usado por uno de los enemigos listados por la Coalición de los Normales. Si Otegui pide la paz, la paz es un concepto inadmisible. Si Fidel Castro dice que la cirugía le salvó la vida, debemos pasarnos a la aromaterapia o la acupuntura. Si Bin Laden dice que la ley de la gravedad es verdadera, es necesario empezar a flotar ahora mismo.

Ejemplo:
WAR IS PEACE - FREEDOM IS SLAVERY - IGNORANCE IS STRENGTH.

Obtención del título de ciudadano normal:

Si bien un discurso puede cumplir con todos los requisitos ya expuestos, eso no implica que el contenido de este no sea ofensivo para la gente de bien. El ciudadano que aspire a un normalidad plena deberá demostrar no sólo su inocencia si no su sinceridad plena, sometiéndose de forma voluntaria a un test poligráfico estricto y un interrogatorio de 28 horas en Guantánamo en los que agentes del ATPLP decidirán si uno realmente cree lo que dice o no. No sea que un enemigo de la patria lea algo normal para cachondearse de lo más sagrado, vamos.

Ejemplo:












Espero haber sido de ayuda. Gracias por su colaboración.

sábado, mayo 12, 2007

Historias del CIS

Un par de comentarios rápidos sobre el CIS, ente que parece ser un nuevo blanco favorito de la derecha. Primero, sí, la pifia de vez en cuando.

Cualquiera que haya tratado de hacer algo de estimación estadística seria (algo que estoy seguro el editorialista de LD no ha hecho en su vida) sabe que equivocarse es relativamente fácil. Las matemáticas detras de una estimación de voto son una ciencia exacta; el problema es que el muestreo y la recogida de datos no lo son. Cuatro asunciones mal metidas, y uno tiene un resultado absurdo. Ciertamente, el hecho que Fernando Vallespín, su director, sea un profesor de Filosofía brillante y un total analfabeto matemático no tiene por qué ayudar, pero vamos, los errores son bastante comprensibles a veces.

Segundo, y quizás más importante, el CIS no es un órgano de propaganda. Para los cuatro matados que hacen Ciencias Sociales en España, sufriendo ridículos presupuestos universitarios, condiciones laborales lamentables y un interés nulo en la investigación empírica de muchos profesores, las encuestas del CIS son una mina inagotable de información, y una de las muy escasas fuentes de bases de datos que permiten hacer algo de investigación seria. De hecho, es una institución relativamente extraña; no hay demasiados países que yo recuerde que tengan un ente de estas características, generando toneladas de información. Cargárselo sería un error tremendo.

A todo esto, los resultados de la encuesta sobre las autonómicas son bastante lógicos, sin demasiadas novedades aparentes. El PP ya "perdió"en agregado en las autonómicas del 2003 (teniendo en cuenta que las dos grandes comunidades socialistas, Cataluña y Andalucía, votan aparte), así que cualquier cosa que no sea ganancias netas de los conservadores debería verse como un mal resultado. Parece que salvo grandes sorpresas el dibujo no cambiará demasiado; veremos.

jueves, mayo 10, 2007

Más allá del aprobado o suspenso

La democracia es un sistema de gobierno relativamente justo con casi todo el mundo menos con los políticos. La confrontación electoral y los cambios de opinión del electorado son siempre feroces, y el líder al que podíamos estar aplaudiendo con las orejas hasta darle una mayoría absoluta ayer puede ser objeto de mofa y escarnio un par de años después de dejar el cargo. Los veredictos en este negocio tienden a ser binarios, de aprobado o suspenso, y la verdad, la cosa es bastante más complicada de lo que parece.

Efectivamente, hoy Tony Blair anuncia su retirada del cargo, tras 10 años de Primer Ministro. Por vez primera un laborista conseguía ganar tres elecciones seguidas, un logro de primer orden conociendo la tendencia del partido a perder el norte. Su dimisión no viene forzada por una derrota electoral, si no por su propio partido, que le enseñó la puerta antes de lo que él hubiera deseado. La imagen de Blair, un político brillante, carismático hasta decir basta, rematadamente inteligente y con unos resultados de crecimiento económico y políticas sociales (si, Blair es de izquierdas. Digan lo que digan) muy loables, sin embargo, es la de fracaso. Y todo por una guerra.

Irak ha sido un error catastrófico; la gran pifia de un Blair que siempre tuvo la idea que usar la fuerza contra régimenes represivos era lo correcto. Siempre he creído (y por lo que he leído hasta ahora, creo que es una hipótesis valida) que mientras que el ejército británico inició la invasión con un plan relativamente sólido sobre qué hacer una vez ganada la guerra (de hecho, los saqueos fueron escasos en su zona de ocupación, por ejemplo), los americanos entraron en el país como quien se va a Lloret a hacer turismo, sin una idea clara de dónde se metían. El espantoso fracaso de la ocupación posterior quizás fuera inevitable, pero la incompetencia de Bremer, Rumsfeld y compañía aseguraron que sí se produjera.

Nada como meterse en una guerra que ya era relativamente estúpida para empezar con una pila de mandriles sin experiencia colonial (ni ganas de escuchar consejos) como aliados, vaya. El legado de Tony Blair, un tipo brillante, de ideas claras y muchísimo talento, siempre estará manchado por este incomprensible, gigantesco error.

No deja de ser una lástima. Jose María Aznar hizo un muy buen trabajo cuando estaba en el gobierno en muchos aspectos. Pasarán años antes que esos se valoren como deben, y no se vean totalmente eclipsados por Irak o la monumental torpeza tras el 11-M. Felipe González hizo probablemente un trabajo aún mejor que su sucesor, y ahí está el recuerdo del GAL y los casos de corrupción emborronando su legado. Sólo ahora cuando ya ha perdido la cabeza de le reconocen a Adolfo Suárez sus méritos. En política la nota media vale bien poco, al menos a corto plazo.

Como señalaba en los comentarios del post de ayer, no se puede hablar de política o economía sin añadir un "pero" a cualquier argumento. El ejemplo de los últimos artículos del Economist es bastante claro: la economía y empresas españolas están funcionando extraordinariamente bien, pero hay riesgos claros que deben ser afrontados. En la situación económica y política de un país siempre hay claroscuros, siempre hay grises, y nunca se puede hablar de una virtud perfecta e inmutable.

A todo esto, el artículo del Economist es mucho menos alarmista de lo que han comentado algunos. De hecho, la muy estricta (y loable) displina fiscal del gobierno, así como el hecho que los datos de productividad son más complejos de lo que parecen es señalado como nota positiva. Y oye, una burbuja inmobiliaria la tien cualquiera; especialmente cuando los tipos de interés son negativos y los controla otro. Ya se ha hecho bastante haciendo que las condiciones para acceder una hipoteca sean más estrictas.

¿Hay riesgos? ¿Hay errores? Siempre. Por algo hay tanto país metiendo la pata por ahí fuera; gobernar es muy difícil. No podemos, sin embargo, abrazarnos al éxito incondicionalmente, ni ignorar los errores cometidos. Es mucho más complicado que eso.

miércoles, mayo 09, 2007

Bocinismo político

El PP y medios allegados se han lanzado a otro episodio de acusación presuntamente demoledora sobre un tema presuntamente importante. El de hoy es un presunto informe escrito presúntamente por Miguel Sebastián o algún presunto colaborador suyo a sus órdenes en un presunto intento de descreditar al presidente de un banco que estaba siendo presúntamente atacado por el gobierno. Oh la corrupción.

Algunas reflexiones. Primero, si para entender de qué está hablando el partido de la oposición un friki de la política como yo debe recurrir a Google, hemeroteca y archivos conspiranoicos variados, algo me dice que el votante medio no va a entender ni jota de todo este asunto.

Segundo, todo el tinglado acusatorio parte de la idea ligeramente rebuscada que el gobierno orquestó un intento de OPA por parte de Sacyr al BBVA, y que utilizó todo el poder del estado y sus instituciones regulatorias para ello. Este enorme poder se resume en un informe que elaboró o llegó a manos de un periodista de la Ser acerca de un presunto delito que había prescrito hace años. El gobierno fue, según todas las hemerotecas medianamente razonables (y no, LD no lo es) un actor pasivo durante todo el proceso. El PP dice que alguien en Moncloa creo un plan maligno para convencer a los accionistas del segundo mayor banco del país a vender sus acciones, y lo único que se le ocurrió fue fabricar una denuncia de tercera división sobre su presidente.

Al presunto escándalo del "asalto", ya bastante raquítico de por sí, el PP debería unirle dos, no uno: lo que dicen que hizo Sebastián para aniquilar a ese Santo Varón y Mártir que es Francisco González (un amigo del PP 100%, todo sea dicho, y gran paladín del asalto al BBV por parte de una banca pública privatizada con él al volante como era Argentaria), y la patética incompetencia del gobierno en asaltar a un banco. Ui, mira, un informe. Risa malvada.

De hecho, el escándalo es lo de menos. El PP sabe perfectamente que no tiene absolutamente nada en términos legales sobre este asunto; sin embargo, es perfectamente consciente que el sistema legal y la capacidad de atención selectiva de la prensa hacen esto irrelevante. La denuncia irá a dar tumbos por algún juzgado, que tardará una eternidad en tomar una decisión preliminar. Si tienen suerte y es un juez amigo (como la del caso del ácido bórico, que se está ganando una nominación al CGPJ) la cosa dará tumbos por los tribunales hasta que alguien sensato mate el caso; si no, será echado a la papelera sin que nadie se dé cuenta y con cero cobertura mediática, saliéndole al PP gratis la pérdida de tiempo.

La esencia para el PP es el ruido. Poco importa que lo que diga sea alegremente irrelevante, la cuestión es parir titulares grandilocuentes. Machacar unas cuantas ideas sin descanso (rendición, corrupción y bobo-solemnez), poner la mierda en el ventilador, y esparcir en masa hasta que algo se quede pegado. Una campaña negativa, al más puro estilo neoconservador feroz americano, en otras palabras.

El problema de hacer política de este modo, sin embargo, es que la mierda acaba por hacer que todo apeste. Sí, la imagen de quien recibe los ataques se resiente (por algo el gobierno no acaba de cuajar en las encuestas), pero quien está lanzando todo ese histerismo al escenario acaba oliendo igual o peor que su objetivo. La valoración de la labor de oposición del PP es sencillamente patética en todos los sondeos, con Rajoy recibiendo una valoración personal más cercana a la de un dirigente del PNV o ERC que la que se le supone al líder de la oposición. Como comentaban por La Moqueta, ciertamente los votantes de centro se han desencantado con el PSOE merced del griterio del PP, pero parece que han acabado reaccionando con pánico a los alaridos de Rajoy; todo ello sin movilizar mucho más a sus bases.

Estos días se habla mucho de lo bien que debaten los franceses y lo maravilloso que es Sarkozy en algunos medios de la derecha (ignorando el yate y todo eso, claro); los que se preguntan por qué no tenemos la misma política sólo tienen que mirar a lo que hace el PP. Y por favor, no me vengan con tonterías que el PSOE crispó en la oposición; tanto la guerra de Irak, como el Prestige, como la espeluznante capacidad de Acebes de decir chorradas tras el 11-M fueron pifias bien reales de un PP que con menos soberbia hubiera ganado las elecciones de calle.

Aquí en Estados Unidos andaban igual el año pasado preguntándose por qué nadie hablaba de ideas, mientras los republicanos seguían llamando a todos abortistas totalitarios cobardes que iban a subir los impuestos. La derrota electoral de noviembre ha conseguido que por aquí se escuchen todas esas tonterías bastante menos que antes. El PP no callará hasta que no se empotre en la urnas, mucho me temo. Veremos qué sucede a finales de mayo.

domingo, mayo 06, 2007

Cazando brujas

En el epitafio de la triste, torpe Ley de Partidos Políticos seguramente se pondrá la fecha de abril del 2007. Estos días me parece que ha quedado claro que cuando un proceso electoral se mezcla con abogados, el único resultado es una batalla legal fea, desagradable y totalmente contraria al espíritu de la democracia.

Primero, debo decir que el efecto de la Ley de Partidos sobre ETA ha sido probablemente devastador. Al cortarle acceso a las instituciones públicas y asegurarse que la amplia de red apoyo social y financiero que orbitaba alrededor de Batasuna se extinguiera, la banda terrorista ha visto su capacidad operativa caer en picado, hasta el patético estado en el que está ahora. El hecho que los efectos de la ley sobre ETA hayan sido terribles, sin embargo, no significa que la ley fuera la mejor respuesta: de hecho, diría que es un instrumento horrorosamente torpe para conseguir los objetivos perseguidos.

Debemos dividir el problema de la existencia de Batasuna en dos aspectos separados. Por un lado, la izquierda abertzale funcionó durante muchísimo tiempo como una tapadera de la estructura logística de ETA. Batasuna no sólo transfería dinero público a la organización (aunque la verdad, el estado no pagó a EH demasiado a menudo), si no que era el centro del enorme aparato de coacción informal y asociaciones y empresas tapadera que recaudaban dinero para ETA. Por otro lado, el partido daba una voz a la banda, molesta, agresiva y desagradable, que hacía la vida a los "disidentes" aún más opresiva, si cabe.

Desde el punto de vista de una democracia, el primer punto es inadmisible, y debe ser combativo con todo el peso del estado. El segundo punto, sin embargo, es un auténtico campo de minas, ya que implica tener que resolver un conflicto entre derechos individuales. En qué punto los alaridos de un matón desagradable se convierten en una vulneración de los derechos de los que opinan distinto es algo muy difícil de calibrar, y que debe siempre tratarse con cuidado.

La ley de partidos, sin embargo, toma como punto de partido que ambos problemas son indivisibles, y decide cargarse a Batasuna y a su derecho a levantar la voz de una sóla tacada. Con ello consigue el primer objetivo de forma admirable, pero por desgracia entra a saco en un sector del ordenamiento político que se debe tratar con mucho cuidado, el de los derechos individuales.

La ley de partidos se ha convertido en una ley de castigo colectivo, simple y llanamente. Atacando un ente abstracto colectivo como era Batasuna, se ha acabado creando un sistema que ataca a los derechos políticos aquellas personas sospechosas de "contaminación". El haber tenido algo que ver con la izquierda nacionalista radical convierte a un individuo automáticamente en apestado, un enfermo político que no puede tocar nada en la esfera pública. No sólo su participación está prohibida; todos aquellos que tienen la mala suerte de formar parte de cualquier nuevo proyecto también corren el riesgo de ser expulsados del sistema. La lista de militantes de un partido ilegal pasa a ser una nueva lista negra de ciudadanos de segunda, que ven sus derechos políticos destruidos de un plumazo.

El resultado es convertir las reglas sobre un proceso electoral en un campo de batalla. Para los nacionalistas, se ve como el estado usa una norma sobre partidos como si formara parte del código penal. Para el PP, es el escándalo constante de perseguir a brujas y demonios por todas las esquinas. Para el PSOE, un surrealista intento de aplicar de forma razonable una ley que no lo es, mientras unos se quejan de represión y los otros de libertinaje. Al final, estamos hablando más de las reglas del juego que de otra cosa, cuando el único que las cuestionaba para empezar es la teórica víctima de la Ley de Partidos.

Es innegable que Batasuna tiene contactos y relaciones estrechas con ETA. Es innegable que ese apoyo logístico debía ser destruido. Lo que me parece absurdo, sin embargo, es usar una ley esencialmente política para combatir algo que debería haber sido atacado utilizando el código penal. Garzón y otros jueces de la Audiencia Nacional ya estaban atacando ese lado de ETA antes que la ley se aprobara. La verdad, hubiera sido mucho más eficaz, limpio y efectivo dirigir la ley en combatir la relación, y no el propio partido político.

A fin de cuentas, una Batasuna legalizada, aunque bajo hostigamiento e investigación constante a cada relación o contacto con la banda armada, sería un instrumento de presión mucho mayor contra ETA que no la situación actual, donde ni unos ni otros tienen nada que perder. A ETA no le importa la legalidad de Batasuna; sería deseable trabajar para que ambas dejaran de estar en el mismo barco.

lunes, abril 30, 2007

De hipotecas y costes crecientes

Las subidas del Euribor se han convertido en una noticia de primera página habitual en los periódicos españoles, que por una vez hablan de un tema que afecta a un número considerable de sus lectores directamente. A diferencia de la descendencia del futuro jefe de estado, los tipos de interés tienen un efecto en el bolsillo de muchos, así que es necesario pararse y repasar los datos.

Las hipotecas en España se han encarecido 1.536 euros anuales en los últimos 19 meses, si tomamos el extremo más tremendista de la estadística. En el último año el índice de referencia ha pasado del 3,221% al 4,251%, una subida notable. Sin embargo, mirar series temporales de datos sin irse un poco atrás en el tiempo es algo relativamente inútil; es necesario tirar un poco más atrás para ver qué significa este 4,251% realmente.

La verdad, significa bien poco. Aún con estas subidas, los tipos de interés en España están a niveles ridículamente bajos históricamente. Si miramos los últimos 18-20 años (y con la economía funcionando a crecimientos razonables, no al nivel frenético de los 80), vemos que han oscilado del 6,63% hasta el 2,076%, estando la cifra actual dentro de un valor medio razonable en esta escala.

En otras palabras: si alguien compró una casa haciéndo números para vivir con los pagos de hace dos años o tres años y ahora está pasando apuros, es que realmente no se podía permitir esa casa. España ha pasado de mínimos históricos (en verano del 2003) a un valor cercano a la media de los últimos 15 años; los pagos de las hipotecas actuales son en cierta medida el valor "correcto" o "habitual", no la anomalía de hace unos meses.

Como bien comentaban por La Moqueta, una hipoteca no es, en contra de lo que dice la leyenda, siempre mejor que un alquiler; de hecho, es bastante probable que sea lo contrario. Aún con el patéticamente limitado mercado en España (hay muy pocas casas en alquiler, en proporción), los pagos de una hipoteca son normalmente bastante superiores a lo que se pagaría por la vivienda de alquiler equivalente. Cierto, uno no está invirtiendo en una casa cuando paga a su casero, pero con pocas excepciones, el valor de mercado de una vivienda a largo plazo no es una forma demasiado rentable de invertir el dinero.

Los precios de la vivienda han aumentado como locos en los últimos 10 años (casi 150%, sin ajustar por inflación), en gran parte debido a los absurdamente bajos tipos de interés; sin embargo, embargo una cartera de acciones de bajo riesgo (el Ibex35, sin ir más lejos) tiene un retorno agregado muy similar, y eso sin contar dividendos. En contra de lo que dice el mito, los precios de la vivienda en términos reales si han disminuido en más de una ocasión (91, 92, 93 y 96, y cito de memoria), y si tuviera que apostar, estoy bastante seguro que el 2008-2010 veremos cifras similares. De hecho, en algunos mercados ya ha empezado a suceder.

Aún con la situación relativamente anómala de España en los últimos tiempos (esto de converger con Europa encarece las cosas algo serio), es necesaria que haya una burbuja sin precedentes para hacer que una hipoteca sea una inversión de primera. El dinero que nos ahorramos alquilando, la verdad, puede ir a cosas mucho más productivas.

Si de hecho miramos los datos históricos de países más normales (esto es, ricos desde hace tiempo, no nuevos miembros del club), veremos que a largo plazo la vivienda tiende a ser una inversión con un retorno medio cercano a cero (precios suben con la inflación), cosa que tiene cierto sentido: en el fondo, la "productividad" de una casa es la misma hoy que dentro de 10 años: es capaz de albergar una familia y punto. Puede que la zona se haga más deseable y el precio suba más, puede que empeore y suba menos, pero de media, las casas de un país no tienen por qué aumentar de precio.

A todo esto, el crash inmobiliario en Estados Unidos sigue a buen ritmo; por algo escribo de esto. De hecho, por eso quiero cambiar de trabajo. Pero esa es otra historia; que contaremos en otra ocasión...

domingo, abril 22, 2007

La AVT y el milagro de la unanimidad perpetua

Anda el señor Alcaraz todo orgulloso diciendo que la AVT es una, grande, libre y representativa, como demuestra que su gestión ha recibido un apoyo unánime en la asamblea. Unánime, el tío. Sólo los líderes del partido comunista búlgaro consiguieron una cosa semejante, un apoyo tan masivo, unas bases tan deslumbradas por el genio político de su presidente que votaron, prietas las filas, todos a favor. Alcaraz, el mejor político desde Pericles. Qué bueno, el tío.

En fin, menuda estupidez. De hecho la misma unanimidad monolítica del voto es un indicador claro que la AVT es patéticamente poco representativa. Sí, quizás todos sus miembros están de acuerdo, pero en una organización de carácter voluntario eso es bastante irrelevante.

Cuando uno pertenece a un club o una asociación y la dirección toma decisiones, uno tiene básicamente tres opciones. Si uno está de acuerdo con lo que el presidente hace, se acepta, y no se dice nada; se sigue leal a la organización. Si uno no está de acuerdo, sin embargo, un miembro puede hacer dos cosas. La primera, la clásica pataleta; se protesta, levanta la voz y se queja que la dirección está haciendo el tonto. La segunda, menos visible en votaciones, normalmente sigue a la de la protesta, si esta es inútil; salir de la asociación, dando o no un portazo.

¿Es el apoyo a Alcaraz en la AVT unánime y sólido?. Sí, sin duda. Los votos están allí, eso no lo niega nadie. Sin embargo, estos resultados son un síntoma claro que la maquinaria política de la asociación no es incluyente, si no que está echando a los disidentes a patadas. A la gente que no está de acuerdo, sencillamente, se le señala la puerta, mientras que la AVT sigue ejerciendo su papel de plañidera mediática con tendencias conspiranoicas oficial del reino, entre aplausos y risas del respetable.

Alguno dirá que el sistema de gobierno de la AVT es abierto y transparente, y que las asambleas votan libremente. Con perdón, pero todos sabemos (y me hecho un panzón de hablar de ello) que una organización de este tipo es fácilmente manipulable, especialmente por gente con recursos, artillería mediática y un infinito afán de protagonismo; algo que según todos los informes, Alcaraz tiene a espuertas.

En fin, después dirán algunos que no usan a las víctimas, y tendrán razón. Lo que usan es la ficción de la mayoría de las víctimas, un espantapájaros de diseño para atizar al gobierno con él. Patético.

martes, abril 17, 2007

Escritos a la espera

Parece que no voy a tener tanto tiempo libre como esperaba al volver de las vacaciones, para variar. Entre el desfase horario y mi jefe, que tiene todo de urgencias esta semana, aún no he tenido tiempo de escribir. Una lástima, porque tengo unas cuantas cosas en mente. Ahí van unos anticipos:
  • El caso Conthe, o como algunos parecen haber olvidado que hacer oposición sobre temas demasiado obtrusos es ciertamente una pérdida de tiempo. Especialmente cuando se dice defender la compra de una empresa española por una alemana mientras se habla de españolidad.
  • El caso Imus, o como uno puede decir tantas tonterías como quiere durante años en Estados Unidos, y ser masacrado por un comentario no demasiado distinto el día menos pensado.
  • La falacia del coste de Kyoto, o cómo uno puede reducir sus niveles de emisiones y seguir creciendo a todo trapo. España lo hace, vamos.
  • Sobre leyes y equilibrios, o cómo las mejores regulaciones son aquellas que apenas necesitan vigilancia.
  • El tiroteo de Virginia, aquí en EUA. En parte porque 33 muertos en una universidad son ciertamente algo espantoso, en parte porque me huelo que hubo una incompetencia colectiva bastante preocupante, en parte porque aquí las noticias no van a hablar de otra cosa durante un par de semanas. Y evidentemente, es hora de hablar de posesión de armas de fuego, un tema mucho más complicado de lo que parece.