¿Soy el único progre izquierdoso que no le aguantaba?. Siempre me pareció un melodramático pedante y sentimental, una especie de Marqués de Bradomín rojo. Ahora que parece que se nos va voy a ser el primero en no decir que era un maravilloso periodista, supongo.
Por cierto, me pasa lo mismo con Arcadi Espada. ¿De verdad hace falta tanta floritura para hablar de política?
Actualización: descanse en paz.
5 comentarios:
Coincido contigo, Egocrata. Yo tampoco simpatizo mucho con las reflexiones de Haro Tecglen. Incluso me molesta que lo pongan como ejemplo de la izquierda.
Apúntame a mi tambien. No aguanto sus moralinas.
En general me gustaba, pero tenía artículos demasiado sectarios. Lo mejor de sus columnas de El País era cuando hacía 'filosofía de cabecera', casi siempre muy acertada e ilustrativa.
Pero bueno, es cierto que tuvo épocas mejores que esta última :D
Sabía mucho más de teatro que de política.
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