viernes, enero 06, 2006

Volando voy, volando vengo (III)

Pues mañana de vuelta a las américas. Así que si este fin de semana no veis escritos en vuestra bitácora amiga no es que me haya quedado de golpe sin opiniones, no; es que estoy entre desfases horarios, aeropuertos, y hacer la compra para llenar una nevera vacia.

Por cierto, si aún queda alguien que me considera un tipo inteligente, un dato: mañana tengo mi vuelo de Barcelona a Amsterdam a las seis de la mañana. Se tiene que ser una categoría muy especial de tarugo para comprar billetes a estas horas; la próxima vez que leais una tontería de post recordad que mi capacidad no llega ni a mirar horas de salida al comprar por internet. Limitado que es uno.

3 comentarios:

Donaire dijo...

De lo más normal del mundo. Es cuando resultan más baratos. Muchos días tengo la sensación de estar abriendo yo el Prat.
Por cierto, ojo, que ésa es la hora predilecta de los amantes de lo ajeno. Querido PC portátil con más de 3 años de trabajo y sin ninguna copia (lo sé, lo sé, hay que ser capullo), dónde quiera que estés, siempre te llevo en mi corazón. Adios giga de música (adios Aznavour). Adios centenar de power points. Adios novela que no soy capaz de reescribir. Te echo de menos.
Perdona, Ego, pero es que aun no lo he superado. El tiempo. Supongo. Lo acaba borrando todo.

Anónimo dijo...

quizas cuando llegues, estemoss en un nuevo regimen, similar al de pinochet-videla.

Ignacio dijo...

¿Llegaste ya, Roger? A ver si nos dejamos ver el pelo más por Madrid y alrededores. Y si no es así, conectate al Messenger, payo. ¡¡Te echamos de menos!! ¡¡Ven a vernos a los madriles!!