martes, marzo 15, 2005

Haciendo balance (3)

Una de las cosas que más agradezco tras la victoria del Psoe el 14-M es que el insulto ha pasado a la oposición. Es cierto que estos señores no cambian. Además, su entorno virtual sigue empeñado en hacer del insulto la única forma de razonar. Son tal la 'fuerza' de sus argumentos, que lo único que se les ocurre es descalificar al adversario. Seguramente, este comportamiento transmite la debilidad de sus ideas. Quizás alguno piense que esto a mí me agrada, puesto que todo indica que la estancia del PP en la oposición va para rato. Pero la verdad es que un gobierno es fuerte no porque de puñetazos en la mesa, si no porque tiene una oposición responsable. Y por ahora, esto no sucede en España. La derecha española ha optado por la fácil: irse al monte y sacar lo peor que llevan dentro. Seguramente una nueva derrota dentro de tres años les moderará, puesto que comenzarán a darse cuenta de la dimensión de su error. Pero mientra FJL y compañía marquen la estrategia de oposición, mucho se tiene que equivocar el gobierno para perder las próximas elecciones. En fin, la mayoría de votantes del PP seguirán esperando un partido capaz de ganar elecciones. Mientras tanto, una minoría se las da de felices porque tiene barra libre para insultar. Es el camino más corto para una nueva derrota.

3 comentarios:

R. Senserrich dijo...

Lo divertido es que si dices que el PP sólo se hace daño a sí mismo haciendo estas cosas, se ofenden.

Anónimo dijo...

El PSOE tiene miedo que el PP diga las verdades de su antiespañolismo, anticristianismo y anticapitalismo, por eso decis estas chorradas.

El socialfascismo de siempre, dando consejos a a la oposición para que se porte bien y no moleste. Asco, da asco.

Anónimo dijo...

Deja las drogas tocayo "Anonymous".