Pues sí, reformando el estatuto de la Comunidad Valenciana al mismo nivel que el de las comunidades históricas, y más allá. Creando una pseudo-agencia tributaria propia, incluso, los muy insolidarios. Aparte, se salen del ciclo de elecciones autónomicas, y ahora podrán votar cuando quieran, en un claro alarde de separatismo. Ni votar a la vez que el resto de España quieren.
Bueno, el PP valenciano, al menos, ha aprobado la reforma; parece que a Rajoy y Zaplana no les entusiasma la idea. De hecho, no han dicho ni pío sobre el tema. Si se mira lo que el PP y PSOE valenciano han pactado, no está demasiado lejos de lo que se pide desde Cataluña, la verdad. Como llevo diciendo desde hacer días, Madrid, Baleares y Valencia están más cerca del tripartito catalán en el modelo de financiación que prefieren que de calle Génova y el PP estatal. Y aquí tenemos a un barón del PP (Camps) rompiendo filas (y metiendo el dedo en el ojo a Zaplana) y pactando lo que le place.
En fin. Rajoy debería aprender a criticar lo que une a su partido, no lo que lo divide. De momento, el PP está siendo bien poco coherente en lo que critica en Madrid pero acepta en las autonomías.
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